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Aunque no hay cifras oficiales en Argentina, el médico forense Carlos Cornaglia advierte que las nuevas tecnologías de la información y el bombardeo a través de la televisión alimentan un fenómeno en crecimiento.
Por Carolina Klepp / [email protected]
“En la actualidad, la sexualidad mediática omnipresente atenta contra el normal desarrollo infantil. Tratamos a los niños como si fueran adultos en miniatura. Los están bombardeando con ofertas de sexo, imágenes en programas de televisión como Rebelde Way, Patito Feo o Tinelli y luego, la curiosidad propia de la edad los lleva a prenderse a Internet donde los cazadores de niños, que también suele denominárseles boy lowers (y girl lowers) los interceptan y los empiezan a desinhibir con fines sexuales”.
Con este llamado de atención, el médico Carlos Cornaglia introduce una de las tantas aristas que manifiesta el fenómeno del ciberacoso a menores que puede luego derivar en la concreción de un abuso sexual, tema del libro que dirigió y que presentará hoy, junto con los coautores, el fiscal Carlos Altamirano y las abogadas Valeria Medina y Teresita Oliva. Antes de la presentación de “Abuso sexual de menores. Criminal plaga”, el médico forense de los tribunales de San Francisco brindó un panorama sobre uno de los puntos de la investigación que detalla el efecto expansivo de las nuevas tecnologías, las redes sociales y la novedosa modalidad del abuso sexual digital de niños y adolescentes.
-¿Cuáles son los datos o situaciones más relevantes que emergen al estudiar el ciberacoso de menores que puede terminar en un abuso sexual?
– El más importante factor que interviene en el auge mundial de la pedofilia es su desarrollo expansivo a través de Internet. Las modernas tecnologías informáticas y de comunicación social (N-TICS), dominando el ciberespacio, han ampliado el espectro de los delitos sexuales con la aparición de nuevas modalidades delictuales cibernéticas, entre las cuales resalta por su magnitud y crecimiento la pedofilia en Internet. No existen estadísticas oficiales fehacientes en Argentina. De tal manera que nos debemos guiar por encuestas de otros países. Al respecto, la ONG italiana Teléfono Arcobaleno, orientada en la lucha contra la pedofilia, ha denunciado en su último informe anual que el fenómeno se ha incrementado en 143% a partir del año 2003. Sólo en 2008 la organización mencionada ha realizado 42.396 denuncias ante las autoridades de 45 países y los proveedores de Internet. No obstante, acreditados informes de nuestro país han reportado que en el último año se ha quintuplicado el consumo de pornografía por Internet en Argentina, según afirmaciones del Consejo Nacional de los Niños, Niñas y Adolescentes (Connaf).
Las páginas o sitios web desde donde se baja el material, producido en Europa y EEUU, se comercializan internacionalmente mediante el financiamiento de tarjetas de crédito. No obstante ser la producción nacional (de pornografía infantil) de menor calidad, su participación en el mercado es cada vez mayor. Los sitios infantiles de Internet son los lugares donde la pedofilia acecha y en los que la pornografía infantil se produce para intercambio o comercialización.
– ¿Qué medidas pueden ayudar a disminuir el riesgo de las chicas y chicos al navegar en Internet?
– Las más recomendadas por los operadores que trabajan sobre el tema son: promover la instalación de juegos factibles de ser clasificados por su contenido; determinar los horarios de uso de la PC; bloquear el acceso a determinados programas; instalar filtros de páginas, sitios y contenidos de Internet y configurar, como permite Google, los buscadores web con resultados sólo aptos para mayores. También se recomienda ejercer el control de los contactos de los niños en Windows Live, tal como lo permite Microsoft; limitar los sitios de visitas infantiles; instalar navegadores infantiles limitados a sitios predeterminados o seleccionados. Pero, a pesar de todo este arsenal técnico disponible, es inexcusable el diálogo fluido de los hijos con sus padres.
Hoy
– Presentación del libro Abuso sexual de menores. Criminal plaga. Editorial Alveroni Ediciones.
– Autores: Carlos Cornaglia -director-, Marcelo Altamirano, Valeria Medina y Teresita Oliva.
– Hora y lugar: 19.30, en la Asociación de Magistrados, Belgrano 224.
– Presentación a cargo de José Cafferata Nores.
