Los rubros de mayor impacto fueron educación e indumentaria, subieron 10,7% y 4,6%
respectivamente. En el primer trimestre del año el incremento relevado fue de 6,4 por ciento
El gasto mensual que deben realizar los profesionales ejecutivos en Argentina para mantener su nivel de vida fue el mes pasado de $120.129 en promedio.
La cifra se desprende de la Canasta del Profesional Ejecutivo (CPE) que acaba de divulgar el Centro de Economía Aplicada de la Universidad del CEMA
Esto indica que la inflación fue de 2,2% en marzo pasado y acumula una suba de 24,4% en los últimos doce meses. En los primeros tres meses de 2018 el incremento fue de 6,4 por ciento.
Los aumentos más fuertes en marzo se dieron en los capítulos de educación y en indumentaria, que subieron 10,7% y 4,6%, respectivamente.
“En ambos casos hay un fuerte componente estacional pero no descartamos que dicha estacionalidad se extienda hasta abril. El rubro de alimentos y bebidas trepó 2,2%, al igual que vivienda y servicios básicos”, aclaró la entidad educativa.
Transporte y comunicaciones subió dos por ciento, apenas por debajo del índice general. Subas inferiores al promedio también se registraron en los capítulos de equipamiento y mantenimiento del hogar, 1,7%, y atención médica y gastos para la salud, 0,6%.
En tanto, el rubro esparcimiento descendió uno por ciento, como es habitual al concluir la temporada de vacaciones de verano. En tanto que el costo de la CPE medido en dólares aumentó 0,2% mensual y se ubicó en US$5.936. En relación a marzo de 2017, la CPE en dólares bajó 4,6%.
Perfiles difíciles de encontrar
En otro orden, ayer de se difundió un relevamiento de Adecco Argentina sobre los ejecutivos más buscados en compañías locales y multinacionales del sector retail. “El personal cualificado (67%) es el más difícil de encontrar en el sector, seguido del personal técnico (19%) y el personal administrativo y de staff (14%)”, sostuvo la consultora de RRHH.
Las mayores dificultades que encuentran los reclutadores tienen que ver, en igual medida, con: la falta de motivación del personal (38%) y que la expectativa salarial es superior a la ofertada. Luego, en menor medida, pero en igualdad de porcentajes: la falta de formación en el perfil buscado (33%) y un nivel de experiencia inferior al solicitado (33%).
La gran mayoría (61%) contrata personal para cubrir reemplazos por renuncia, despido o enfermedad, 52% para cubrir nuevos puestos, 17% contrata personal eventual para fechas puntuales y el 13% por la apertura de nuevos puntos de venta.
Al consultarles sobre sus perspectivas para el 2018, nueve de cada 10 empresarios prevén tener un buen año.