Cinco proyectos con el objetivo de contribuir al diagnóstico, prevención y/o tratamiento de enfermedades infecciosas, fueron seleccionados en la segunda edición del concurso por subsidios para enfermedades infecciosas que lleva adelante la Fundación Bunge y Born, informaron ayer voceros de esa institución.
Las investigaciones harán foco en estudiar la efectividad de la vacuna utilizada en Argentina contra el rotavirus; estudiar el virus de la hepatitis E en pacientes con hepatopatías crónicas e inmunosuprimidos; desarrollar dispositivos para la detección rápida del Chagas; investigar la prevalencia de infección por HIV, por los virus de la hepatitis B y C, y por sífilis, en grupos poblacionales vulnerables a estas enfermedades, y en implementar nuevas tecnologías para el estudio del microbioma intestinal en pacientes pediátricos.
El desarrollo de estos proyectos contribuirán al diagnóstico, prevención y/o tratamiento de enfermedades infecciosas, a través de modelos de intervención efectivos, pasibles de ser escalados a las políticas públicas.
Los ganadores del subsidio de hasta tres millones de pesos son investigadores argentinos y argentinas que se desempeñan en instituciones sin fines de lucro tales como centros asistenciales, universidades y centros de investigación. Los proyectos tendrán una duración de hasta 24 meses.
Entre ellos, Alejandro Castello, doctor en Ciencias Básicas y Aplicadas, por la Universidad Nacional de Quilmes, coordinará el proyecto para evaluar la efectividad de la vacuna monovalente contra el Rotavirus en poblaciones de distintos medios socio-económicos de Buenos Aires.
En tanto, Andrea María Mercedes Mangano, doctora en Microbiología por la Universidad de Buenos Aires, es una de las ganadoras del concurso con su proyecto “Implementación de nuevas tecnologías para el estudio del microbioma intestinal en pacientes pediátricos, trasplantados de médula ósea y receptores de trasplante de microbiota fecal”.