ESCUCHARLa directora del Laboratorio en Comunicación y Género (UNLP), Florencia Cremona, destacó que el feminismo no es una reducción a la cuestión de roles sino que refiere a la ampliación de derechos y al acompañamiento de leyes con transformaciones culturales
Por Carolina Klepp – [email protected]
¿De qué hablamos cuando hablamos de género? ¿Cómo incluirlo en la comunicación, allí donde escasea su presencia? ¿Qué es el feminismo y cómo quitarle el estigma que algunos le imprimen? ¿Cómo construir voces plurales y lograr transformaciones culturales?
“Cuando hablamos de género no nos referimos a los problemas de las mujeres sino a la construcción y redistribución del poder, a la dimensión relacional que el género tiene como un modo de distribución y reproducción desigual del poder”, definió Florencia Cremona, doctora en Comunicación Social y directora del Laboratorio en Comunicación Educación y Género de la Universidad Nacional de La Plata, en el marco del encuentro entre periodistas, referentes políticos, judiciales, sociales y educativos en el que se debatió sobre “Géneros y feminismos en las retóricas periodísticas actuales”.
La especialista disertó el viernes pasado en La Rioja, en la jornada organizada por la Federación Asociativa de Diarios y Comunicadores Cooperativos de la República Argentina (Fadiccra), de la que participó Comercio y Justicia como medio integrante de esa entidad.
“Entendemos el género como una dimensión transversal para analizar el tejido social y por tanto como una herramienta de acción colectiva, cuyo trabajo deviene en el análisis crítico de las relaciones sociales. El género, como categoría de análisis, nos permite disputar nuevos sentidos y generar estrategias de cambios en nuestras propias prácticas cotidianas conducentes hacia la profundización de los derechos sociales”, afirmó Cremona, quien además dirige la Diplomatura en Identificación de las Violencias de Género del Instituto Nacional de Investigaciones Históricas Eva Perón, de la cartera de Cultura de la Nación.
En este sentido, hizo referencia al movimiento feminista y señaló: “El feminismo no es una reducción a la cuestión de roles. Habla de ampliación de derechos y de acompañar leyes con transformaciones culturales”.
Como ejemplo, señaló los debates por el aborto legal y paridad de género en la política, destacó que en ambos aún persiste una tensión entre el reconocimiento de derechos que expresan los avances normativos y las resistencias culturales. Para superar estas barreras, apeló a la conceptualización de la antropóloga e investigadora sobre género Rita Segato, quien sostiene que “la meta feminista es el pluralismo”.
Cremona subrayó la importancia de promover y derribar mitos del movimiento feminista: “Estamos atravesando momentos críticos a niveles social y cultural que nos llevan a pensar en un feminismo que pueda conversar y hacer sus aportes a la política, por eso es fundamental buscar otros modos de encontrarnos”, precisó.
En su disertación marcó un recorrido histórico sobre la participación de la mujer quienes hace apenas 70 años tienen derecho al voto.
Describió las limitaciones en el acceso al trabajo o en ascenso a cargos de decisión. También marcó la inexistencia de las denominadas “políticas de cuidado” al advertir que el cuidado de niños y ancianos sigue recayendo fundamentalmente sobre las mujeres. Abogó por la generación de dispositivos educativos para que las propias mujeres puedan “deconstruirse” y tomar decisiones en relación con la posibilidad de participar.
Construir voces plurales
Entender la comunicación como un derecho permite construir nuevas retóricas, descripciones y relatos. “Es pensar lo que sucede con las mujeres, con las discriminaciones, las violencias, los femicidios, esto tiene que ver con la responsabilidad de los medios de comunicación de construir voces plurales”, subrayó la especialista.
Además, se refirió a las conductas machistas tanto dentro de los medios como en sus producciones, aunque destacó algunos avances: “Los medios de comunicación son parte de la sociedad, no están en Marte, producen y comunican desde lo que suponen que le va a a gustar y va a generar empatía en el otro.
Ha habido avances, hay chistes que ya no se pueden hacer, hay formas culturales que ya son repudiadas y consideradas abusos. Hay un balance que se está dando entre lo que venimos reclamando los movimientos de mujeres, de derechos humanos, de LGBTQ”.
Asimismo, valoró la incorporación de la figura de “editoras de género” en algunos diarios de alcance nacional: “Es algo imprescindible que deberían incorporar todos los medios, que no necesariamente se trata de periodistas, sino también de intelectuales, profesoras, sociólogas, personas que vienen trabajando estos temas, para hacer una mirada integral. El problema es que el género aparece hoy en la sección Policiales pero hay que preguntarse cómo analizamos la Economía, la Salud, la Educación desde una perspectiva de género”.
Como ejemplo, analizó las coberturas en el debate sobre despenalización del aborto. “Siendo que la comunicación un derecho humano, los medios no pueden abordar la temática de aborto desde el prejuicio de una lectura emocional o religiosa, estamos hablando de derecho. Hay que pensar cómo se construyó la sacralidad de la mujer madre, hay que pensar qué prejuicios hay en torno a la sexualidad femenina”.
Finalmente, se refirió al estigma que suele conllevar identificarse como feminista: “Ser feminista es desmarcarse de lo común, es hablar de sexualidad, es decir yo tengo una vida, un deseo, una existencia y todo eso ha estado callado durante siglos, entonces levantar la voz, decir yo quiero, yo puedo, siempre da miedo”.
Debate abierto
El gobernador Sergio Casas destacó la importancia de la perspectiva de género
El gobernador de La Rioja, Sergio Casas, recibió en la Casa de Gobierno a la doctora en comunicación y feminista Florencia Cremona con quien dialogó sobre la inclusión de la perspectiva de género en diferentes ámbitos. El mandatario destacó que la provincia viene trabajando en el tema, que cuenta con un Juzgado de Violencia de Género y abogó por la incorporación del lenguaje inclusivo en la sociedad.
También participó de la audiencia la vicepresidenta primera de la Cámara de Diputados riojana, Adriana Olima, quien detalló que días atrás la legislatura provincial aprobó la adhesión a la Ley Micaela que promueve la capacitación obligatoria en género para todo el personal de los tres poderes del Estado.
A su turno, Cremona destacó la necesidad del encuentro entre las comunicadoras y los políticos a la hora de abordar la perspectiva de género en tanto que unos y otros son actores de la transformación política y cultural. Además, hizo referencia al debate sobre despenalización del aborto y la postura que tomó esa Provincia en contra la despenalización del aborto. Cabe recordar que el año pasado, el gobernador Casas promovió que La Rioja sea declarada provincia Pro Vida, incluso portando él mismo el símbolo del pañuelo celeste. Sobre el tema, Cremona señaló que en el encuentro con periodistas -que había tenido lugar horas antes de la audiencia con el gobernador- se planteó la importancia de “poder pensar que los derechos están por encima de las convicciones personales”.
Finalmente, Julio Delgado, presidente de Fadiccra -entidad organizadora del encuentro-, concluyó que “como sociedad percibimos la necesidad de plantear debate con la comunicación de perspectiva de género tanto en comunicadores, políticos y dirigentes que son quienes transforman con sus discursos diarios”.El femicidio infantil de Sabina, presente
El pedido de justicia por el femicidio de Sabina Condori ocurrido el mes pasado también estuvo presente durante la jornada del viernes. Se trata de la niña boliviana de 11 años que había salido a comprar pan en el barrio Virgen Desatanudos de la capital riojana y nunca más volvió a su casa. La encontraron muerta y había sido violada. Una de sus maestras de la escuela pública donde asistía estuvo también participando del encuentro sobre género organizado por Fadiccra.
En lo que va del año, según un relevamiento del Observatorio de Proyecto Generar, en Argentina se registró un femicidio cada 33 horas. En los primeros cuatro meses de 2019 hubo 87 víctimas fatales
