Por Sergio Castelli* y María Constanza Leiva*
Tal como mencionamos en otra oportunidad, México ha logrado obtener la consagración del tequila como una bebida alcohólica con denominación de origen, es decir, sólo aquella bebida elaborada bajo las condiciones y en Estados mexicanos podría llevar dicho nombre.
La consagración del tequila resultó de suma importancia para ese país, ya que ésta es reconocida como su bebida más representativa y el respeto de la denominación de origen implica, en consecuencia, un aumento en las ventas de los productores locales.
Ahora bien, no todo es color de rosa, ya que el obtener la consagración de la denominación de origen de un producto no lo es todo sino que la mayor lucha llega después, cuando hay que pelear por hacer valer y respetar dicho nombre, sobre todo contra aquellos grandes tiburones del mercado que pretenden obtener provechos indebidos.
Ése fue el caso con la cervecera neerlandesa Heineken, que sacó al mercado una cerveza denominada “Desperados” que incluye la indicación “tequila” en el frente de la botella, ayudando a los consumidores a hacerse la idea de que dicho producto se encuentra combinado en la bebida.
Ante esta situación, el Consejo Regulador del Tequila comenzó una batalla legal para exigir que Heineken fuera obligada a eliminar la indicación “tequila”. Pero no contaba con el revés judicial que vendría de parte del tribunal de primera instancia ubicado en Amsterdam: fallo en contra.
El tribunal, además de rechazar las reclamaciones del consejo por entender que se trata de una asociación que no puede considerarse un competidor, comerciante o consumidor, consideró que el reclamante también debía hacerse cargo de las costas judiciales que se le generaron a la multinacional cervecera, que superan 31 mil euros.
De acuerdo con la sentencia, el organismo mexicano reclamaba que la cervecera cesara el uso de la denominación “tequila”, ya que no es una parte esencial del producto comercializado, y que a su vez este último tampoco cumple con los requisitos aplicables al tequila –cuando menciona los requisitos se refiere lógicamente a los de elaboración y producción conforme denominación de origen–.
El consejo requería igualmente, que se ordenara a la fábrica neerlandesa detener todos los anuncios de su producto en los que se usara la palabra “tequila” y que, además, abonara una multa por cada violación, resarciendo de ese modo los daños causados al consejo y pagar los costos del proceso judicial.
“Desperados” es una cerveza con “aroma a tequila”, que surgió en Francia en 1995 inspirada en el envase de las cervezas mexicanas. El conflicto surge de que la norma mexicana establece que para poder vender una bebida mezclada con “tequila” es necesario que éste represente 25% del contenido del producto, y si fuera elaborada “de tequila”, entonces ese contenido tendría que llegar al menos a 51%.
Pese a las malas noticias para el consejo mexicano, en el fallo se reconoce que “Desperados” contiene 0,14% de componentes aromáticos, 75% de los cuales son tequila, por lo que el porcentaje de tequila en el producto total es de 0,1%.
Los demandantes argumentaron ante el tribunal de la capital neerlandesa que, en virtud del acuerdo comercial entre México y la Unión Europea, los productos en los que se incluya tequila deberían respetar las regulaciones mexicanas al respecto.
La derrota legal de los tequileros mexicanos se produjo justo dos meses después de que entrara en vigor el registro en la Unión Europea del tequila como indicación geográfica, lo cual supone una mayor protección de la bebida mexicana en esa región.