Argentina, como todo país de estructura federal, combina y debe armonizar la gestión de tres jurisdicciones -nacional, provincial y municipal-, lo que implica generar condiciones de funcionamiento para resolver los problemas de unos 850 diversos fiscos.
Por Salvador Treber – Exclusivo para Comercio y Justicia
El Ministerio de Finanzas de la Provincia de Córdoba demoró inexplicablemente hasta el 24 de marzo ppdo. para divulgar oficialmente la evolución de los ingresos tributarios percibidos en su jurisdicción durante el primer bimestre de 2014. El mismo día, el secretario General de la ciudad capital trató de desautorizar una elaboración del concejal capitalino Esteban Dómina sobre la evolución creciente en cuanto al número de agentes, asegurando que en el curso de los dos últimos años ascendieron a 1.673.
Sergio Torres, quien fue presidente de la empresa Tamse -y que no se caracterizó por regentear una administración prolija y racional-, no hesitó en descalificar el trabajo sin hacer ningún análisis de su composición, desconociendo la fuente y prefirió circunscribirse a sostener que “sólo se incorporaron 450 agentes nuevos”; ya que, según su evaluación, más de 650 datan de las gestiones precedentes y lo único que se habría hecho respecto de ellos era “regularizarlos”. Cabe recordar que el total del plantel en enero 2014 requirió el pago de 10.882 remuneraciones salariales; mientras que en idéntico mes de 2012 eran 10.024.
Resulta menos admisible aún aceptar su aclaración en el sentido de que “Al margen de que la mayoría eran necesarios, había una cuestión jurídica de derechos adquiridos”, pero que para futuras “efectivaciones” se realizarían mediante concursos. Esta promesa lanzada al aire está en abierta contradicción con su anuncio de que “1.250 personas fueron transferidas a las empresas privadas de transporte y otras 1.600 a las tareas de recolección de basura”, habiendo, por tanto, dejado de revistar en la nómina municipal.
Ya transcurrido el primer trimestre de 2014, que la Municipalidad siga sin hacer la rendición de cuentas correspondientes a todo el ejercicio 2013 no habla bien de sus equipos especializados.
Los profesionales que se ocupan de encarar tareas de esta naturaleza sostienen que con los elementos incompletos de que disponen ha quedado patentizado que el desequilibrio presupuestario siguió creciendo en una proporción inusitada. Por tanto, debe reiterarse el requerimiento de que se clarifiquen dichas cuentas de inmediato.
Los ingresos tributarios de la Provincia
A diferencia de la Nación, cuya Tesorería General detalla en los dos o tres primeros días de cada mes los ingresos tributarios que ha logrado por todo concepto y su respectiva asignación interjurisdiccional, el Ministerio de Finanzas de nuestra provincia se mantuvo en estricto silencio hasta el pasado 24 de marzo, cuando aportó la información para el primer bimestre.
En ese lapso, por recaudación propia y transferencias provenientes de la jurisdicción superior, después de corregir un día después un error de $100 millones en el impuesto de Sellos de enero, se determina que percibieron $6.647,5 millones, los cuales implican una cifra 42,1% superior a los $4.678,6 millones que se obtuvieron en idéntico lapso de 2013. Proviene del Régimen de Coparticipación Federal y las demás leyes especiales sobre la materia la suma de $3.812,2 millones, que equivalen a 57,3% de aquel total general y superan en 42,1% los respectivos $ 2.682.2 millones de 2013. Esto significa, pese a los reiterados reclamos en las áreas de la Gobernación, que los aportes nacionales han tenido una expansión muy similar -según su comparación interanual-, a los tributos legislados y administrados por la Dirección General de Rentas.
En efecto, en función de ellos lograron ingresar $2.835,3 millones contra $1.996,1 millones del año precedente, lo que se traduce una mejora de 45%, lo que constituye un registro óptimo. Dado que ciertos tributos de vencimiento anual ofrecen descuentos a los titulares que los cancelen en cuota única o paguen la primera hasta fines de febrero, resulta obvio que en la medida que opten por esta alternativa disminuirán el monto a percibir a futuro y ello contribuye a bajar luego la proporción de origen local. A fin de febrero llegó sólo transitoriamente a 43,6% del total general.
Desagregados en su composición estos últimos, se advierte que el impuesto a los Ingresos Brutos produjo por sí solo $2.121,5 millones (74,8%), inyectando una marcada tónica regresiva a la carga tributaria originada en Córdoba. Cabe agregar que en el bimestre sujeto a análisis dicho importe resultó 44,7% mayor que el obtenido en igual lapso de 2013, gravitando para ello el hecho de que su alícuota general sea la más alta entre las que se aplican en cada uno de los demás los 23 fiscos locales. En segundo término -pero a gran distancia- se ubica transitoriamente el impuesto Inmobiliario (rural y urbano), con $442,6 millones, exhibiendo para este bimestre su mejor registro de todo el ejercicio (16,5%), como consecuencia de los pagos por todo el año antes mencionado.
En este caso, es seguido por el impuesto de Sellos, con $257,6 millones, luego de corregirse en el Ministerio el error inicial cometido, pero si bien en este momento representa apenas 9,1% será, en definitiva, el segundo, pues en el transcurso de los 10 meses restantes llegará, como lo hizo en años anteriores, a preceder al Inmobiliario, que ahora está haciéndolo transitoriamente. Cierra tal esquema financiero el impuesto sobre los Automotores, que siempre suma poco; en esta oportunidad algo menos de $54 millones, que exceden en 40,6% los 38,4 millones de 2013. El desequilibrio que causa la falta de otros ingresos adicionales de naturaleza semejante ha impulsado a la administración fiscal a encarar una intensa campaña de verificación que, en sus primeros meses, ha detectado evasiones que en muchos casos superan lo recaudado y es muy posible que inunden de juicios los tribunales.
Al margen de lo expuesto, siguió rigiendo la mal llamada tasa vial (en realidad, un impuesto), sobre cuya legalidad debe expedirse la Corte Suprema -que inexplicablemente está demorando-. Dado que su posición es débil, la Provincia para este año ha resuelto participar en 20% su rendimiento a los municipios con afectación de destino (arreglo de caminos y calles), a la espera de que esta nueva situación postergue el tan retardado fallo.
Las mejores noticias se vinculan con la evolución de la economía provincial. En 2013 se habría logrado, según la información oficial emanada en la Dirección de Estadística y Censos, un incremento de 5,93%, que se ha sustentado en la expansión del agro (+24%) y de la buena performance habida en el industrial (+6,28%), pese al “bajón” operado en los últimos dos meses y la débil gestión. De esta forma se marcó una significativa recuperación respecto de la caída de 3% registrada en 2012.
La Nación y los ingresos tributarios del trimestre
Con notable diligencia, el primer día de abril se verificó la conferencia de prensa en la que el titular de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) y el secretario de Hacienda de la Nación informaron que en el recién finalizado marzo se habían recaudado $78.709, es decir, 30,6% por encima de idéntico mes en el año anterior. Dicho porcentual es algo inferior al de los dos meses anteriores; aún así, computado el total del trimestre, la cifra resultante ($ 250.180 millones) revela que para ese lapso hubo una satisfactoria suba interanual de 33,9%. Debe agregarse que, de esta suma, $76.500 millones (30,4%) fueron girados a los fiscos locales en concepto de Coparticipación Federal, siendo dicho importe 38,9% mayor que el que siguió igual destino en 2013.
Apelando a un examen desagregado de ese tercer mes se advierte que el impuesto al Valor Agregado fue el que más se superó, con $25.529,4 millones que equivalen a 32,4% del total general, excediendo lo obtenido en 2013 en un notable 39,1%, y 3,5% mayor que el logrado un mes atrás. Tanto los funcionarios mencionados como los receptores de la noticia adjudicaron la principal causa de ello al alza generalizada de los precios internos, aunque olvidan que tal factor ya tenía vigencia, por tanto, no explicaba cabalmente que hayan mejorado los buenos resultados de enero y febrero. Además, debe subrayarse muy enfáticamente que la base fundamental de imposición, el consumo interno, se ha mantenido en altos niveles aunque pareciera no hizo modificar los índices de incumplimiento.
Un caso totalmente diverso es el del impuesto a las Ganancias, que sólo aportó $ 14.939 millones e implican un aumento interanual de 27,8% pero un gran retraso respecto al 44,8% que exhibió un mes antes. Esta situación, a todas luces anómala, sólo se puede explicar por una mayor evasión y, quizá en cierta medida, al planteo sobre elevación de lo mínimos no imponibles que han enarbolado algunos dirigentes políticos de la oposición.
Los gravámenes afectados a financiar el sistema de seguridad social aportaron $ 20.880,5 millones, con un relativamente modesto índice de incremento (+24,3%), ya que éste rondaba habitualmente 30%. Debe suponerse que también en esta área una franja de contribuyentes u obligados se ha retraído pues no ha bajado el número de ocupados inscriptos. Esa disminución es importante al reducir el aumento en no menos de 25%.
En cuanto a la imposición ligada específicamente al comercio exterior, generó en conjunto $7.459 millones. Corresponden mayoritariamente a Derechos a las Exportaciones que giraron a Tesorería $5.343 millones (+33,7%), complementados por los que recaen sobre las importaciones, que agregaron otros $2.116 (+28%). Detrás de éstas aparece el impuesto sobre Débitos y Créditos Bancarios -el que se suele llamar “mpuesto al cheque”-, con $5.287,7 millones que, al cabo de 12 meses, creció 29,3%.
Al cierre de la mencionada conferencia de prensa, a los funcionarios presentes se les interrogó sobre la posibilidad que se incremente el mínimo no imponible y demás cargas deducibles que rigen en el impuesto a las Ganancias, tal como lo proponen algunos líderes opositores, pero la respuesta al unísono fue que no hay ningún proyecto en elaboración sobre ese aspecto. Tal posición fue luego ratificada por el vocero oficial en su habitual exposición diaria, agregando que tales requerimientos corresponden a “estrategias de reclamo permanente”, restándoles -por tanto- cualquier grado de seriedad.