Para Mariano Albrisi, cada vez que la Anses se desfinancia, busca “a los manotazos” hacerse de alternativas para paliar su situación.
Días atrás, el titular de la Administración de la Seguridad Social (Anses) Diego Bossio, expresó que Argentina va a un proceso de envejecimiento poblacional como Europa. En tal sentido, dijo que “allá aumentaron la edad para jubilarse”. Dejó entrever que habría que estudiar la suba de la edad jubilatoria en nuestro país.
Factor dialogó con Mariano Albrisi -abogado laboralista- para conocer su opinión sobre un eventual incremento en la edad para acceder a la jubilación y sus posibles efectos en el sector empresarial.
¿Qué opinión le merece lo expresado por el funcionario?
-Bossio no alude a otro argumento para elevar la edad jubilatoria que el de comparar la realidad jubilatoria de nuestro país con la del viejo continente. Afirmar, como lo hace el titular de la Anses, que Argentina va a un proceso de envejecimiento poblacional como Europa, no es al menos un fundamento jurídico ni científicamente válido. Sería un disparate equiparar niveles y condiciones de vida entre un habitante europeo con uno argentino. Las condiciones laborales del mercado europeo, a su vez, son radicalmente opuestas a las existentes en nuestro país. Debe partirse de la base que el envejecimiento poblacional, si bien es cierto, no es equiparable.
Un jubilado europeo de 75 años no transita los padecimientos de uno de igual edad en nuestro país. Y mucho menos, un trabajador europeo no transcurre su vida laboral con los penosos padecimientos laborales que sí sobrelleva un obrero argentino. Médicamente, dos personas pueden llegar a envejecer hasta los 80 años en diferentes continentes. Pero la cuestión, será ver en qué condiciones de salud se encuentra uno respecto del otro.
En el caso en que hubiese un cambio en la legislación actual y se elevara la edad, ¿cómo cree usted que impactaría tal medida en el sector de los dadores de trabajo y en los trabajadores?
-Pienso que el impacto sería negativo para ambos polos, el patronal y el obrero. Los empresarios por su parte, verían incrementados sus desembolsos al mantener y extender en el tiempo cargas previsionales de sus planteles, que día a día incrementan, con gran presión fiscal y sin contemplaciones.
Los trabajadores deberían extender su expectativa jubilatoria sin ningún beneficio a cambio en el monto de su haber jubilatorio: hoy se jubilan con 60 o 65 más diez años de aportes para acceder a una jubilación magra e insuficiente. Cuasi vejatoria. ¿Con más años de aportes y trabajo cambiará dicha situación? Por supuesto que no. Ningún beneficio habrá, ni para empleadores ni para trabajadores. Sí, quizás lo haya, para la gran masa de desocupados sin necesidad ni intencionalidad de “ocuparse”; de permanecer subsidiados por un sistema obtuso.
Lo mencionado por Bossio ¿tendrá que ver con un ‘desfinanciamiento’ de la Anses?
-Sin ninguna duda. Cada vez que la Anses se ‘desfinancia’, busca a los manotazos hacerse de alternativas para paliar esta situación. Supo hacerlo en su época cuando el Gobierno buscó fondos con el blanqueo de empleos y, esta opción bajo análisis es una más de tantas ideas arrebatadas para mantener la que es, ni más ni menos, que la caja-sustento de lo electoral y popular. Sucede que las contradictorias decisiones pasadas, en pos de mantener y reflejar a la sociedad una idea de gobierno progresista y protector de los intereses de los argentinos en situación de mayor vulnerabilidad, encuentran hoy en día su límite: la realidad. Y ésta nos dice a priori que es hora de frenar la indiscriminada diseminación de subsidios a costa del trabajo y la inversión efectiva, y es hora de cesar en el financimiento de una caja a costa del acoso fiscal a los bolsillos de los trabajadores y los empleadores.