La posibilidad de controlar el tiempo y viajar a través de él se convirtió en una obsesión de la mente humana, al punto que la ciencia ficción hizo de las suyas con este tema. Uno de los grandes e inolvidables éxitos es y será, sin dudas, la trilogía de Volver al futuro, en la que el joven Marty McFly se ve involucrado en las alocadas ideas del científico doctor Emmet Brown, más conocido como “Doc”, quien logra crear una máquina que los lleva a diferentes momentos en la historia.
El más alocado de sus viajes fue el que se desarrolló en la segunda película, filmada en el año 1989, en la que el viaje de Marty y el Doc los lleva al 21 de octubre de 2015, cuando se encuentran con maravillosos e increíbles avances tecnológicos.
La imaginación del autor y director Robert Zemeckis diseñó una versión que, por suerte o por desgracia, no se cumplió a rajatabla. El 21 de octubre de 2015, muchos fans de la trilogía se lamentaron al comprobar que seguíamos sin aeropatines, pero pudieron consolarse con que algunos de los inventos que descubrimos con Marty han acabado por convertirse en una realidad.
Si bien para el año que corre los patines aún necesitan ruedas, la marca japonesa Lexus viene a brindar un pequeño consuelo, y es que se encuentra trabajando en un dispositivo que mediante superconductores enfriados con nitrógeno podría levitar gracias al magnetismo.
Pero la compañía que sí decidió hacer el sueño de Zemeckis realidad, fue Nike, que presentó en 2015 el modelo de zapatillas Nike Air Mag, las que tal como las usa McFly en la película, se autoajustan sin necesidad de cordones.
Y es que Nike venía trabajando en éste deseo de hacerlas realidad desde hacía un tiempo; en el año 2011 presentó una serie limitada de zapatillas que tenían la misma estética que las de McFly, que se iluminaban con LED durante cuatro horas con una sola carga, pero con la diferencia de que no eran autoajustables. Incluso, sacaron una publicidad de éstas, en la que llega el Doc al local comercial Nike y, al verlas, pregunta si son autoajustables, a lo que los vendedores le contestan que eso no sucederá hasta 2015.
Y es que un año antes de lanzar las Mag2011, Nike había presentado una solicitud de patente donde presentaba su nueva invención: un sistema aplicado a las zapatillas que incluye una batería interna e incluso una base de recarga.
Este pequeño motor que llevarían las zapatillas en su suela, estaría conectado a un sistema de bobinas en el que irían enroscados los cordones, que rotarían desde la suela, para que así se cerrasen los que están sobre el empeine, permitiendo que se ajusten al pie del usuario “automáticamente”.
La activación del cierre de cordones funcionaría con un sensor de peso que detecta el momento en que la zapatilla es puesta en el pie, lo que activa el motor de los cordones. Aunque también estaba prevista la posibilidad de activar el motor de los cordones a través de un botón.
Cuando llegó 2015, Nike anunciaba felizmente la llegada de las Nike Air Mag, una limitadísima edición de zapatillas autoajustables e iluminadas.
“El resultado es un sistema de respuesta individual que detecta el movimiento del usuario para brindar comodidad y apoyo adaptables a pedido”.
El presidente y director Ejecutivo de Nike, Mark Parker, dijo en su momento: “Empezamos a crear algo para la ficción y lo convertimos en realidad, inventando una nueva tecnología que beneficiará a todos los atletas”.
Otra de las novedosas tecnologías previstas por la película para 2015 son las videollamadas: el pobre McFly adulto es despedido de su trabajo a través de una de éstas. Y, si bien ya estaba presente en 2015, llegó a invadirnos como una realidad cotidiana recién a partir de 2020, cuando la pandemia por covid-19 obligó al mundo a encerrarse en cuarentenas, dejando éste como el único medio de contacto con familiares y afectos, como también en el medio laboral.
Y así es como la ciencia ficción ha resultado ser una inspiración más que productiva para el desarrollo tecnológico.
* Agente de la propiedad industrial ** Abogada