lunes 25, noviembre 2024
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Comercio y Justicia 85 años

Cierre de 2014 y perspectivas para 2015

Por Salvador Treber. Exclusivo para Comercio y Justicia
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El año pasado fue de crecimiento virtualmente nulo pero hay una serie de factores concurrentes que hacen suponer que en el presente habrá cierto grado de recuperación, especialmente impulsado por las inversiones provenientes de China.

El último mes del año pasado fue relativamente exitoso en materia de recaudación tributaria pues ésta ascendió a $108.598,8 millones; cifra que refleja un notable incremento interanual de 42,8% con lo cual el sumatorio de los doce meses llegó a $1.169.682,7 millones que, evaluado con idéntico criterio, concreta una suba de 36,2% que, sin ser excepcional, constituye testimonio de una buena performance.

El principal destinatario de dichos fondos fue la Administración Central, que receptó $534.712,1 millones; cifra 39,2% por encima de la que se había dispuesto en 2013. En segundo lugar aparece lo transferido a las provincias (coparticipación y otros conceptos adicionales), que totalizaron $304.783 (+37%); relegadas a un tercer término, aunque por muy leve margen, se ubican las Contribuciones de Seguridad Social, que ascendieron a $297.504 millones. Éstas alcanzan un total bastante menos satisfactorio pues han sido de sólo 29,5% respecto de 2013.

Dado que no hubo un descenso sensible en la cantidad de aportantes, es muy probable que haya crecido la fracción “en negro” y ello merecería una acción verificatoria inmediata. Escalonados detrás se encuentran los tributos que recaen sobre el comercio exterior; que, en conjunto, contribuyeron con $114.147 millones pero cabe distinguir que todos los méritos deben adjudicarse a una muy significativa mejora de los Derechos de Exportación que, con $ 84.088,2 millones, registraron un aumento de 51,6% pese a que las exportaciones sufrieron en ese lapso un descenso de 13,2%. En cambio, paralelamente las importaciones acusaron una baja de 12,8% mientras que los Derechos respectivos llegaron a sólo $ 30.058,9 millones, evidenciando un modesto índice que apenas llega a 27,6%.

Los precitados son seguidos por un tributo que suele seguir la tendencia que registra el IVA y aparece con $ 76.738,8 millones. Se trata del que pesa sobre Créditos y Débitos en Cuentas Corrientes Bancarias que en 2014 ha elevado su aporte relativo en 35,8%, siendo este coeficiente de actualización muy cercano a la media anual que surge considerando el total general de todos los ingresos de dicha naturaleza que integran el sistema.

Debe recordarse que la gestión del sector público nacional se nutre adicionalmente de fondos provenientes de las utilidades contables que informa el Banco Central en el ejercicio cerrado en el año precedente, a las cuales se suman los derivados de valores públicos colocados en el Sistema de Seguridad Social. Lo percibido de esa forma permitió disminuir el desequilibrio presupuestario en $120.470. De esa forma se circunscribió a $104.719 millones el mismo que, de todas maneras, se traduce en un incremento considerable pues por medio de procesos semejantes, en 2013 este concepto llegó a $64.478 millones; lo cual significa que el reciente cierre de 2014 se lo ha hecho con una suba de 62,4% respecto del año anterior.

Los principales ingresos tributarios
El IVA es tradicionalmente el recurso de esta naturaleza más restrictivo. Durante el año 2014 aportó, por todo concepto, $331.202,8 millones, 28,3% del total general, dentro de los cuales $231.260,4 millones fueron recaudados por la AFIP que supera a 2013 en 33% y $104.965,4 millones captados por la Dirección General de Aduana e implica un incremento menor (29%) tras haber concretado reintegros por $11.215,3 millones.

A continuación le sigue el impuesto a las Ganancias con $267.0751 millones; que concreta una superación interanual óptima de 45,5% más que en el año precedente. Cabe además subrayar que no incluyendo los recursos de Seguridad Social, de afectación específica, sólo por medio de los dos tributos anteriormente referidos se reúne 63,4% del total general manejado por la Tesorería General. Si a ellos se agregan tanto los al Comercio Exterior como sobre Débitos y Créditos en Cuenta Corriente, se cubre 85,65%; lo cual revela el grado de concentración vigente en la materia.

La evolución de las erogaciones
Del análisis del gasto según su composición, surge que los identificados como “corrientes” subieron 44,8% mientras la inversión real directa lo hizo en una medida bastante inferior (+32), en tanto, la cuenta total de intereses y otros gastos financieros tuvieron un inusitado aumento (+69,4%) ya que pasaron de $ 42.177 a $ 71.429 millones. Esta conformación no es la más aconsejable seguramente y está además influida por el significativo volumen de subsidios que treparon a $176.590 millones. Los funcionarios y técnicos del Ministerio de Economía optaron por otra explicación, sosteniendo que “durante el año 2014 Argentina se desenvolvió en un contexto externo desfavorable debido al bajo crecimiento económico de nuestros principales socios y a la caída de los precios de nuestros principales productos de exportación”. Esta opinión es una visión muy parcial pues si bien el principal país asociado (Brasil) sufre un cierto grado de estancamiento y/o retroceso que, especialmente, afecta a la industria automotriz, tal tendencia también se advierte en casi todas las áreas del mercado interno.

Según información emanada de la Cepal, nuestro país, al cierre del año mencionado, es en América Latina el que exhibe los menores índices en materia de incremento del PBI (-0,2%), sólo superada en tal sentido por Venezuela que tuvo una merma de -3%. Es cierto que se debilitó bastante la economía brasileña pues, luego de proyectar una mejora del +3%, se vio obligada a corregir esa estimación cuatro veces a la baja para registrar definitivamente un muy modesto +0,2%

Pero los demás vecinos del sudcontinente han tenido buenas performances: Chile, 1,8%; Uruguay +3,5%; Paraguay, +4% y Bolivia, +5,2%. Esta sola referencia nos obliga a admitir que “algo” no funcionó adecuadamente pese a los valores récord que asumió el intercambio con China. Con cierto “conformismo”, el titular de AFIP, Echegaray y el Secretario de Hacienda, Pessoa, insistieron en las consecuencias derivadas de la “complicada situación económica de los principales socios comerciales y la caída en los precios de los granos”.

El jefe de AFIP se detuvo a advertir que de todo los instrumentos tributarios sólo dos de ellos, los que recaen sobre exportaciones e importaciones, estuvieron 5% debajo de los cálculos preventivos. En cuanto a las quejas de muchos importadores por la presunta existencia de trabas a su actividad, el titular de AFIP no vaciló en responder que “las opiniones y quejas de empresarios se enmarcan en el medio de intereses de quienes quieren tener la mayor ganancia por su actividad”. Resulta obvio que se trata de planteos contrapuestos que obedecen a sus respectivas funciones pero respecto de 2014, ello es pasado” y lo esencial será ocuparse en avanzar lo máximo posible en 2015.

La gestión en el primer bimestre de 2015
Los datos difundidos sobre los ingresos tributarios en el primer mes del corriente año implican una baja porcentual en el ritmo de crecimiento interanual pues los $117.458,4 millones captados resultan sólo 30,1% superiores en su cotejo interanual y apenas 8,2% por encima de lo obtenido en el mes precedente aunque las Contribuciones de Seguridad Social ascendieron a $ 36.577,2 millones como consecuencia de incluir las correspondientes al segundo medio aguinaldo. En cuanto al IVA, el tributo que encabeza la recaudación, llama poderosamente la atención que $33.544,7 millones resultan apenas 23,2% mayores a lo ingresado en idéntico lapso de 2014 y +10,2% que en el inmediato mes de diciembre.

El mejor resultado lo exhibe el impuesto a las Ganancias, que captó $ 25.875 millones; los cuales superan en 40,8% a los $·18.371,9 millones que se alcanzaron en dicho mes de 2014. La cifra es virtualmente idéntica a la del mes precedente que, para su caso, por recaer sobre actividades pasadas, constituye un testimonio de eficiencia operativa que no puede extenderse al IVA, donde la merma no aparece justificada.

Se hallan también las dificultades que se presentan en el mercado mundial pues los Derechos de Exportación, al cabo de 12 meses, crecen un modestísimo +8,5% aunque frente al inmediato precedente diciembre el descenso es mucho mas significativo -14,7% ($ 4.343,6 millones). Por su parte, los Derechos de Importación que son de volumen inferior, en el término de un año subieron 11,6% y 16,3% respecto de diciembre de 2014 pero con ello no cubren siquiera la pérdida de valor adquisitivo operado. Surge de lo expuesto que salvo el impuesto a las Ganancias, todos los demás, aunque en diversa medida, han retrocedido y, si ello perdura en los meses subsiguientes, se acrecentarán las dificultades de gestión.

Por ello esperaban con cierta expectativa lo que sucedería en febrero, no tanto por que en el mes más corto del año (18 días hábiles) se pudiera revertir sino a la espera de que no se agudice la situación insinuada en enero. En función de ello, pese a que el incremento interanual fue de 31,3% ($106.557,9) le correspondió en febrero sólo $ 36.271 millones que implican un preocupante aumento de 25,4%, o sea, 9,7% por debajo de enero.

A la Administración Nacional accedieron sólo $36.271 millones que significa una muy modesta mejora con respecto de igual mes de 2014 (+25,4%); lo cual queda muy en evidencia al verificar que los fondos afectados al Sistema de Seguridad Social, medidos en la misma forma crecieron 35% y los girados a Provincias hicieron lo propio en un 35,4%. Sobre la o las causas de ese notorio desequilibrio no han aportado ninguna explicación.

El tributo que en la misma forma ha avanzado en +39,7% ha sido el impuesto a las Ganancias, que logró un acrecimiento de $25.165,1 millones (+39,7%); mientra el IVA, que encabeza el registro con $31.013,2 millones, exhibe un mediocre 25,7%. En tercer lugar, entre los destinados a la Tesorería, se ubica el impuesto sobre Créditos y Débitos con poco exitosos $ 6.498,1 millones que acusan un llamativo debilitamiento (+15,5%). Estos dos últimos recursos contrastan muy evidentemente en su evolución con respecto de los que tienen como destino el Sistema de Seguridad Social (+35,5). Tan diversa gestión merece que se haga un concienzudo análisis sobre sus reales causas. No sería nada extraño que la evasión sea uno de los factores decisivos de resultados tan contradictorios.

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