El de Miami es un mercado inmobiliario más que tentador para inversores internacionales, sobre todo después de la crisis hipotecaria de 2008 que, lejos de representar un problema, se transformó en una oportunidad. “Los precios de las propiedades cayeron entre 50 y 70%. Esto generó que las unidades se comercialicen subvaluadas, y permitió a inversores latinoamericanos invertir en un país del primer mundo, con sistemas jurídicos estables”, explica Marcelo Wolff, director de la empresa Resma LLC, que comercializa propiedades en Florida.
Es tal el nivel de actividad en Miami que, según explica Virginia Di Salvo, directora de Fortune Internacional, “una de cuatro transacciones con propiedades en EEUU se llevan a cabo en la Florida”. Los productos que se comercializan son sobre todo torres de alta gama, housings y condominios; su cotización arranca desde US$ 50 mil (pero puede llegar a US$ 500 mil), y la renta anual oscila entre 2 y 7%, dependiendo de la unidad. “Hoy la búsqueda es muy variada: hay inversores que quieren utilizar la propiedad y buscan comprar en la cercanías de la playa, mientras que otros compran buscando una renta mensual en condados como Aventura o Brickell”, agrega la ejecutiva.
Ahora bien: ¿Cómo invertir desde acá sin riesgos? Lo primero que hay que hacer es encontrar una empresa confiable. El resto no es tan complicado: “El negocio es muy sencillo, todo se puede hacer vía Internet, las leyes y el sistema en EEUU facilitan todos los trámites. No hay impuestos extra, no hay trámites complicados, el dinero se transfiere y no es necesario viajar, ni siquiera tener Visa de los EEUU”, explica María Torino, de Grondona y Asociados.
“Los argentinos responden muy bien a las oportunidades de negocios en Miami, seguramente porque tenemos una muy buena cintura por las crisis que nos han tocado vivir, y esto nos permite reconocer oportunidades para diversificar las carteras de inversiones”, añadió.