El ex viceprimer ministro británico y actual director de Facebook, Nick Clegg, afirmó que los nuevos centros de “integridad de las elecciones” de la red social reunirán a “docenas de expertos” en un enfoque de “respuesta rápida para combatir la desinformación” o los fake news en los comicios.
En su primer discurso en nombre de la empresa, el responsable de comunicación y asuntos globales de Facebook sostuvo que el centro con sede en Dublín, Irlanda, se basará en la experiencia obtenida de la gestión de una “sala de guerra de elecciones” que la red social puso en práctica en Estados Unidos, en las legislativas de noviembre pasado.
El nuevo centro, junto con otro que tendrá sede en Singapur, fue anunciado por la compañía californiana como parte de una serie de acciones para morigerar los intentos de interferencia extranjera en las elecciones -en este caso las del Parlamento Europeo, en mayo próximo-. El objetivo, según se indicó, son: “adversarios inteligentes y bien financiados que están adaptando y cambiando sus tácticas”.
Los centros reunirán expertos en inteligencia sobre amenazas, ciencia de datos, ingeniería, investigación, operaciones comunitarias y equipos legales, de acuerdo a lo que informó Clegg durante una charla que dio en Bruselas, Bélgica, y fue transmitida en vivo por la red social.
Así, los expertos trabajarán en colaboración con los legisladores, las comisiones electorales, otras empresas de tecnología, académicos y grupos de la sociedad civil para luchar contra las noticias falsas, evitar la propagación de los “esfuerzos de supresión de votantes” e integrar los equipos que trabajan en estos temas en Facebook, Instagram y WhatsApp.
Autorizados
Las personas que publiquen en Facebook anuncios con temas “importantes” y “muy debatidos” sobre las elecciones al Parlamento Europeodeberán acreditar su identidad y obtener una autorización.
La medida cubrirá no solo los anuncios de campaña sino también aquellos que no mencionan a un candidato o partido político, pero que discuten temas debatidos e importantes.
La medida busca evitar situaciones como la experimentada en las elecciones estadounidenses de 2016, cuando la red social se convirtió en el vehículo de miles de noticias falsas financiadas por organizaciones (principalmente rusas), que buscaron interferir en los comicios y que fueron vistas por cientos de millones de personas.