La terminal aérea inició las obras de ampliación, que sumarán 10.300 m2 y demandarán una inversión de mil millones de pesos
Por Carolina Brenner – [email protected]
La resolución judicial que restringe la operación nocturna entre las 22 y 7 del día siguiente en el Aeropuerto El Palomar puede afectar la totalidad de su programación de vuelos y -en consecuencia- a casi un millón de pasajeros que -se estima- pasarán por esa terminal aérea de septiembre a marzo próximos, debido a la necesidad de readecuar los itinerarios de toda la operación en esa franja horaria.
Así lo advirtieron en conferencia de prensa -a la que fue convocado – los actores vinculados a esta medida, encabezados por el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich; Ramiro Tagliaferro, intendente de Morón, y los CEO de las compañías aéreas Flybondi y JetSmart.
“Esta medida es grave ya que si prospera puede afectar no sólo a los empleados directos y a las compañías aéreas que operan acá sino también a todo lo que funciona alrededor del aeropuerto. Tenemos en el país 50 aeropuertos y ninguno tiene restricción y no es que El Palomar tenga más densidad poblacional alrededor que el resto”, expresó Dietrich. “Esto implicaría dos grandes riesgos: que colapse todo el sistema aéreo argentino, y que no sólo se pierda empleo sino que el aeropuerto no sea viable y deje de operar”, agregó el ministro.
“El Palomar es el primer aeropuerto low cost de Latinoamérica. Lamentablemente, desde su apertura hubo un puñado mínimo de personas que trató de detener el progreso. Fueron buscando excusas pensando que dañan a un espacio político y lo que hacen es perjudicar a la gente. Estamos en riesgo de perder el empleo que se genera en muchas provincias. Por otro lado, hay que destacar que 80% de los vecinos de Morón dice que quiere el aeropuerto y hay sólo un reclamo por el tema ruidos”, agregó Dietrich.
Por su parte, según destacaron las compañías aéreas, esta limitación también implica que deban redefinir sus planes de inversión y crecimiento en rutas tanto de cabotaje como internacionales, dos factores claves que generan empleo directo e indirecto.
“Lo más preocupante de esta medida es que afecta directamente a miles de trabajadores y pone en riesgo la sustentabilidad del negocio de la compañía. Por otro lado, coloca a toda la industria frente a una vulnerabilidad regulatoria enorme para los demás aeropuertos, como Aeroparque y Ezeiza, que operan en condiciones urbanas y operacionales similares o peores a las de El Palomar”, expresó Sebastián Pereira, CEO de Flybondi.
“Hay que tener en cuenta que la magnitud de esta decisión es nacional. Una decisión basada en el derecho al descanso de un solo vecino será en detrimento del derecho a trabajar, a poder transportarse a bajo costo, e incluso a una mejor calidad de vida de miles de personas”, agregó Pereira.
“Los gobiernos provinciales están muy preocupados por esta medida porque tiene un impacto directo en la oferta y conectividad que reciben sus provincias?. Además, cada conexión aeérea es un aporte enorme para las provincias ya que genera empleo directo e indirecto, y un gran desarrollo de las economías regionales”, destacó el directivo.
Finalmente, Gonzalo Pérez Corral, country director de JetSmart, concluyó: “Esta situación va a estar involucrando a todas las provincias; a partir de ella, puede haber un impacto muy grande en la comunidad aeronáutica argentina” y aclaró: “Nosotros seguimos apostando al país. Estamos trayendo el cuarto avión y estamos pensando en cuantos más argentinos vamos a unir”.
Vale destacar que el Aeropuerto El Palomar ya es el séptimo del país en flujo de pasajeros desde que inició los vuelos comerciales, desde donde ya trasladó a más de 1,6 millón. Realiza en promedio 40 operaciones diarias y 1.200 vuelos mensuales.
El mes pasado inició una obra que demandará una inversión de mil millones de pesos y sumará a la terminal aérea 10.300 metros cuadrados. El proyecto prevé inaugurar en agosto de 2020 y tendrá una capacidad para seis millones de pasajeros.
El proyecto de la nueva terminal tiene como objetivo la refuncionalización de los hangares 7 y 8 existentes en la Base Aérea. La nueva terminal tendrá 18 mostradores de check in. También, como soporte técnico y funcional el proyecto incluye cinco edificios complementarios: el edificio de control de plataforma, el edificio técnico, el edificio de control vehicular, la caseta de media tensión y el portal de acceso al aeropuerto.