Desarrollan nueva cabina sanitizante para prevención de contagios

Diseñada y fabricada por CuboxPVC, desinfecta a la persona que ingresa al
habitáculo mediante aspersores líquidos en forma de lluvia de microgotas

CubozPvC junto a la empresa Tecnoperfiles desarrollaron un dispositivo sanitario innovador que consiste en una serie de cabinas sanitizantes ideales para prevenir la circulación del Covid-19 en espacios de circulación masiva de personas.
El objetivo de esta herramienta, diseñada y fabricada por empresas nacionales, es cuidar la salud de las personas que lentamente están retomando sus actividades cotidianas en espacios concurridos.
La cabina de PVC desinfecta a la persona que ingresa al habitáculo, mediante aspersores líquidos en forma de lluvia de microgotas. A su vez, cuenta con un sistema de rayos UV para la auto desinfección de la cabina.
“Se trata de un innovador sistema mediante el cual el usuario, cuando lo desea, puede activar el sistema de rayos desinfectando el interior de la cabina. Asimismo, las cabinas sanitizantes pueden ser utilizadas para la desinfección de objetos, como por ejemplo, paquetería”, explicó Mauro Fernandez, propietario de la firma CuboxPVC. La medida que comenzó en China y se replicó en otras partes del mundo ante el avance del coronavirus, fue adoptada por la empresa argentina, que la fabrica y comercializa a nivel local y regional.
La cabina sanitizante es ideal para ser instalada en los ingresos de espacios de circulación masiva de personas, como oficinas, comercios, bocas de subtes u otros lugares proclives a la aglomeración de personas.
Este sistema está diseñado para que circulen alrededor de 250 personas por hora aproximadamente, y puede ser instalado tanto en el interior como en el exterior de un edificio o de espacios concurridos.
La cabina, fabricada íntegramente en PVC y con perfiles de Tecnoperfiles, es ideal en estos casos debido a las bondades que proporciona el material: resultan espacios fáciles de transportar (pesa alrededor de 120 kilos), brinda hermeticidad y baja conductividad térmica que evita la condensación y minimiza las posibilidades de filtraciones, tanto de aire como de agua. Además, no requiere mantenimiento y tiene una larga vida útil.
Para su correcto funcionamiento se requiere de tres pasos. En primer lugar la persona debe higienizar sus manos a través del dispositivo de alcohol en gel dispuesto en el ingreso de la cabina. Posteriormente, a través de un sensor automático de movimiento, se acciona el sistema de desinfección por aspersión de agentes químicos. En el tercer y último paso, la persona gira 360 grados con los brazos abiertos y durante ocho segundos pasa a través de un sistema de aspersión (riego), siendo rociada con microgotas de tamaño menor a 30 micrones, de un solución de ácido hipocloroso al 0,05%, validado por la Agencia de Protección Ambiental (EPA, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos y por la Organización Mundial de la Salud (OMS) logrando así, la desinfección total exterior de la persona que ingresa a la cabina. El sistema sanitizante de rayos UV del tipo germicida, (de longitud de onda 253.7 nanómetros) que se utiliza para la auto desinfección de la cabina, afecta la estructura molecular de microorganismos y elimina virus, bacterias, hongos, levaduras, protozoos y otros patógenos.
Los perfiles utilizados en estas cabinas sanitizantes permiten una resistencia a la corrosión, al envejecimiento y al ataque químico, atmosférico y bacteriológico. También impiden la propagación de la humedad en los ambientes, evitando afecciones respiratorias producto de la contaminación por agentes externos. El PVC es un material inerte y versátil que es utilizado en una gran cantidad de productos para el cuidado de la salud.
“Estamos muy comprometidos con iniciativas que colaboren a mitigar los efectos y consecuencias de esta pandemia que afecta a todo el mundo. Es un momento de aprendizaje y de crear nuevos hábitos, y estamos orgullosos de poder participar en estos nuevos proyectos destinados a mejorar la calidad de vida de las personas y que definitivamente cambiarán nuestro estilo de vida en forma integral”, concluyó Fernando Martínez, presidente de Tecnoperfiles, firma de más de 40 años de trayectoria en la industria del PVC.
Vale destacar que esta empresa, en 2004, inauguró en Argentina su primera planta de producción de 7.000 m2 dedicados exclusivamente a la fabricación de perfiles PVC, con la tecnología europea, a la que luego sumó un centro de distribución de 3.000 m2 que abastece una demanda creciente a nivel nacional e internacional.
Actualmente, tiene presencia en Brasil, Chile y México como filiales internacionales y representaciones en Bolivia, Colombia, Costa Rica, Cuba, Ecuador, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú y Uruguay. Cuenta con más de 150 fabricantes certificados de puertas y ventanas de PVC en Argentina y cien en Latinoamérica que cumplen con las normas europeas de elaboración.