Ocho de cada diez empresas (77%) no cuentan con un plan formal de respuesta ante un ciberataque que se aplique de forma sistemática en toda la organización, reveló una encuesta global a profesionales de la tecnología y la ciberseguridad.
La falta de inversión en inteligencia artificial y aprendizaje automático representa una de las principales barreras a la capacidad de una firma de protegerse y defenderse ante ciberataques (resiliencia cibernética), según los resultados del informe realizado por el Instituto de Investigación Ponemon y denominado “The 2018 Cyber Resilient Organization”.
“Una empresa ‘ciber-resiliente’ es aquella que puede prevenir, detectar, contener y recuperarse de innumerables amenazas graves contra datos, aplicaciones e infraestructura de tecnología”, explica el documento.
El estudio encuestó a más de 2.800 profesionales de seguridad y tecnología de todo el mundo para conocer el estado actual de la resiliencia cibernética de las organizaciones.
La escasez de profesionales especializados dedicados a la seguridad fue el segundo obstáculo mencionado por los encuestados respecto de la capacidad de una compañía para hacer frente a los ataques. Aquí no cuenta sólo la capacidad de detectar a tales profesionales sino también la de retenerlos.
En esta línea, sólo 29% consideró contar con el “equipo ideal” de trabajo para dar respuesta a una situación crítica en ciberseguridad.
A pesar de que 77% de las empresas no cuenta con un plan formal de respuesta, 66% piensa que la gravedad de los ataques aumentó.
Sobre esta percepción, cabe destacar que 72% de las organizaciones afirma sentirse más “ciber-resilientes” que el año pasado.
No obstante, el documento sostiene que sólo 31% de las empresas cuenta con un presupuesto de resiliencia cibernética adecuado.