La justicia federal detuvo este jueves a los líderes de Revolución Federal, el grupo de ultraderecha dedicado a escrachar a dirigentes políticos y al que se vincula con el atentado a Cristina Kirchner.
La decisión se tomó en el marco de una causa por amenazas contra la vicepresidenta y otros dirigentes políticos, y que es llevada adelante por el juez Marcelo Martínez de Giorgi y el fiscal Gerardo Pollicita en paralelo a la investigación del atentado.
Martínez de Giorgi dispuso la detención del líder y vocero de Revolución Federal, Jonathan Ezequiel Morel, quien tras el atentado estuvo en varias entrevistas tratando de desligarse de los supuestos vínculos con Fernando Sabag Montiel y Brenda Uliarte.
Además de Morel, también fueron detenidos otros dos integrantes del espacio, Leonardo Sosa y Gastón Guerra. Este último tomó notoriedad por haber encabezado el ataque contra la camioneta de Sergio Massa, el día de su asunción como ministro.
El juez también ordenó la realización de once allanamientos en el Gran Buenos Aires. La investigación se encuentra bajo secreto de sumario por lo que se desconocen los motivos de la detención de los líderes de Revolución Federal.
Esta causa ganó relevancia pública porque el juez investiga si los hermanos del ex ministro macrista Luis “Toto” Caputo financiaron con 7 millones de pesos a Morel y su grupo. Martínez De Giorgi puso el foco sobre transferencias sospechosas que se hicieron desde los fideicomisos Espacio Añelo y Santa Clara al Sur, de la firma familiar.
En la investigación se subrayó que el dinero se retiró en efectivo de manera inmediata y que Morel y dos allegados de apellido Balboa y Vallero figuran como monotributistas y ninguno registra antecedentes comerciales por esos montos en la actividad declarada. El propio Morel admitió que desde su carpintería hizo “un trabajo para un fideicomiso”.
Esta causa también estuvo en debate porque en un principio Martínez De Giorgi le había remitido el expediente a la jueza María Eugenia Capuchetti para que se tramite junto a la investigación del intento de asesinato de la vicepresidenta. Pero la jueza se negó y la Cámara le dejó la causa a De Giorgi.