Por Luz Saint Phat / [email protected]
Una de las problemáticas más complicadas que se extendió durante 2024 fue la adicción a las apuestas digitales por parte de la población más joven. La mirada de un especialista sobre un complejo emergente
Los juegos de azar online, que se han expandido debido al avance del mundo digital en la vida cotidiana, conllevan grandes riesgos en materia de salud mental, sobre todo para la población de niños, niñas y adolescentes de todo el mundo.
Así lo advierten diariamente diferentes entidades especializadas y la alarma ya es generalizada, debido a las consecuencias que se están comprobando clínicamente.
En relación a este tema santuario emergente, Comercio y Justicia dialogó con el doctor Andrés Luccisano, psi quiatra infanto juvenil y subjefe de Salud Mental Pediátrica del Hospital italiano, quien explicó algunos de los factores que contribuyen a la existencia de la ludopatía en edades tempranas, al mismo tiempo que enfatizó en la importancia de la prevención.
“Si bien la ludopatía es algo que conocemos desde hace mucho tiempo, lo que llama la atención hoy es el inicio temprano de esta patología”, destacó el especialista, agregando que aunque todavía no existen datos actualizados de Argentina sobre este tema, sí es posible extrapolar información internacional como la existente en España. Allí, según destacó el galeno, se ha comprobado una “reducción significativa en la edad promedio de inicio”, que ha descendido de 26 a 18 años en solo cinco años. “Esto es alarmante y refleja un cambio cultural importante”, aseguró.
Además, Luccisano explicó el complejo mecanismo que se encuentra ligado al desarrollo de la ludopatía, destacando cuestiones relacionadas con la época. “Estamos en un momento en el cual el placer domina y es lo que mueve absolutamente a todos. La ludopatía tiene esto del placer como origen, a partir del juego, que no solamente genera la satisfacción de ganar o la adrenalina de lo que se puede ganar o perder, sino también la satisfacción del premio y la promesa de hacerse de mucho dinero de manera fácil y rápida”.
En tanto, precisó que un factor determinante es la invasión de la publicidad, que se encuentra disponible en todas las pantallas a las que se acceden en la infancia yen la adolescencia. “Hoy en día, estamos invadidos por publicidades que presentan la apuesta online como algo divertido y grupal, a menudo asociado al deporte. Esto genera una falsa sensación de satisfacción y bienestar”, advirtió.
Adicción comportamental
Por otro lado, Luccisano también detalló cómo se presenta esta patología y qué síntomas tiene asociados
“La ludopatía es, en realidad, una adicción comportamental”, indicó y refirió que “a diferencia de otras adicciones químicas, donde hay una sustancia que genera dependencia física, la ludopatía tiene que ver con lo que se genera a nivel de la mente y del psiquismo, mediado por neurotransmisores”.
Específicamente, los juegos digitales – dijo- proporcionan un placer efímero pero de alto impacto, lo que lleva a la mente a buscar repetir la experiencia. “Esto es lo que se observa, por ejemplo, en las vías dopaminérgicas. La dopamina es un neurotransmisor asociado a las vías de recompensa y placer, y son las que principalmente se activan durante la ludopatía”, precisó.
En cuanto al comportamiento, los afectados suelen presentar cambios significativos. “Por lo general, hay cambios de hábitos con tendencia al aislamiento, pérdida de interés social y un descenso en el rendimiento académico. Además, pueden experimentar alteraciones en el ciclo de sueño-vigilia, irritabilidad, depresión y ansiedad”, comentó el especialista.
Prevención
Finalmente, Luccisano indicó que para prevenir la ludopatía, es esencial que los padres y profesionales estén atentos a las prácticas de los jóvenes con los dispositivos electrónicos. “Es fundamental controlar y conocer qué están haciendo en línea, especialmente con el uso de billeteras virtuales que les permiten apostar con facilidad”, aseguró.
La prevención también pasa por una comunicación abierta entre padres e hijos, así como con los educadores. “La escuela debe ser una vía de comunicación efectiva. Si se observa algún comportamiento preocupante, es importante buscar la orientación de un profesional”, recomendó.
Mientras, en relación al tratamiento, el profesional destacó la importancia de un especialista en salud mental y la existencia actual de grupos de apoyo que han demostrado ser efectivos, especialmente en el caso de adolescente.
De todas maneras y más allá de la importancia de que cada vez se pueda contar socialmente con más información y que los especialistas puedan abordar las situaciones problemáticas de manera adecuada, el psiquiatra enfatizó en que el enfoque debe estar en la prevención y la educación.
“La prevención es fundamental y, en este caso puntual de la ludopatía, la comunicación entre los jóvenes y los adultos, sobre todo entre los padres y los hijos, es clave. También, la escuela debe ser un espacio de comunicación y educación sobre los riesgos de la ludopatía“, enfatizó.