Cristina Petit, vicedecana de la Facultad de Psicología de la UNC, colaboró en la elaboración del Programa de Concientización e Información para el uso responsable de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) de Córdoba. La docente advierte de la importancia de que los educadores sean formados en esa temática desde una perspectiva crítica.
Por Luz Saint-Phat – @LuzSaintPhat
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Aunque el debate sobre la incidencia de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) en los individuos se plantea desde -al menos- la mitad del siglo XX, la masificación del uso Internet y los dispositivos móviles de conexión en los últimos años vuelven a depositar las miradas sobre una temática que está lejos de poseer una respuesta unívoca.
Así, ante el surgimiento de nuevas formas de violencia, acoso e invasión de la intimidad de las personas, los distintos actores sociales insisten en la necesidad de regular los espacios de interacción virtual.
El 10 de septiembre pasado, la Legislatura de la Provincia de Córdoba convirtió en ley el Programa de Concientización e Información para el uso responsable de las Tecnologías de la Información y la Comunicación y para la prevención y cuidado frente al grooming (ley 10222).
La normativa propone, principalmente, la creación de un conjunto de recursos didácticos y de talleres para las comunidades de docentes, padres y alumnos de todos los niveles educativos, a los fines de promover un uso atento y crítico de las TIC en todo el territorio provincial.
En la formulación del proyecto participó como asesora en la temática la vicedecana de la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC), Cristina Petit, quien actualmente también se desempeña en la institución como profesora titular de la cátedra Psicología de las Masas y Medios de Comunicación y directora del Observatorio de Jóvenes, Medios y TIC.
En conversación con Comercio y Justicia, la docente manifestó la relevancia de las TIC en la constitución subjetiva de las personas y advirtió de la necesidad de capacitar desde una perspectiva crítica a los educadores de todos los niveles.
“Participé de los debates en la Legislatura para comentar un poco sobre el impacto psicológico que tienen las TIC y los medios de comunicación. En ese sentido, lo principal es señalar que el impacto es a lo largo de todo el desarrollo de la vida y que no es lo mismo la apropiación que realizan los niños, los adolescentes, un joven o un adulto”, especificó Petit en conversación con este medio.
“Pero creo que lo fundamental es señalar que hoy la utilización de las TIC atraviesa la simbólica de la cultura. Hoy se entra a la cultura a partir de los nuevos dispositivos y las tecnologías estructuran la subjetividad y la identidad de las personas. Es decir, la identidad del individuo está mediada desde su tierna infancia por la cultura de la imagen y la cultura de las tecnologías”, aseguró Petit.
“En el observatorio proponemos trabajar sobre el concepto de apropiación, entendiendo por eso la relación que tienen los individuos con las tecnologías de la información y la comunicación. En este punto, es interesante ver cómo -aunque existen hoy muchas plataformas y dispositivos- los sujetos se apropian más de unas que de otras en determinados momentos de la vida”, dijo.
“También es importante tener en cuenta que las tecnologías no son neutras sino que tienen determinadas prestaciones y posibilidades. Hoy, en el marco de esas posibilidades, las personas -y sobre todo los jóvenes- pueden hacer un per saltum de la autoridad, de los límites, del control y de la educación de padres y docentes y ése es el problema principal”, señaló la vicedecana de Psicología.
“Los chicos ya han internalizado que con un celular multimedia, desde cualquier lugar y en cualquier momento, pueden hacer lo que quieran. Pueden estar en un aula hostigando a alguien, mandar mensajes, conectarse a las redes sociales y no hay posibilidad de acompañamiento de los adultos”, señaló Petit.
“Así, la única vía para pensar un manejo responsable es la educación institucionalizada y escolarizada de los docentes. Hoy, nuestros educadores hacen sus carreras sin tener en su currícula materias que realmente enseñen el uso crítico, el alcance y los límites de las nuevas tecnologías. En su mayoría, todos acceden lúdicamente y no hay conciencia de las posibilidades de esta arma tan potente”, aseguró Petit al respaldar la intención de la recientemente sancionada normativa.
“La educación genera la posibilidad de que los docentes puedan desarrollar un manejo, uso y conocimiento crítico de las tecnologías. Crítico, en el sentido de los estudios culturales. Es decir, crítico como receptores activos en el marco de la historia personal y colectiva y en un momento específico”, aseguró la docente.
Más información:
• Ley provincial 10222
• Investigaciones del Observatorio de Jóvenes, Medios de Comunicación y TIC