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Por primera vez, un testigo reveló ayer detalles de cómo se realizaban los traslados de los presos políticos durante la última dictadura militar.
Con un relato contundente, Daniel Eduardo Bozano dijo haber visto cuando llegó una comisión policial a la UP1 y se llevó varios detenidos vendados en un Torino. “A los minutos se escucharon las ráfagas de tiros”, remarcó.
El ex conscripto asignado a la Policía Militar confirmó que los militares usaban la UP1 como base de operaciones y aseguró que las guardias duraban una semana y eran relevadas por otra unidad, el Regimiento de Infantería Aerotransportada 2.
En otro tramo de la declaración, el testigo relató que en una noche que estaba de franco fue convocado para el traslado de un cadáver, que sería aparentemente de René Moukarzel, fallecido el 14 de julio de ese año luego de cruentas torturas.
El testigo dijo que fue a bordo de su jeep llevando al acusado Gustavo Alsina hasta el Hospital Militar, mientras que en una camioneta F100 se trasladaba el cuerpo.
“Hacen bajar el cuerpo. Entonces el oficial Montes, que era compañero mío y trabajaba en una funeraria, vuelve consternado y me dice que lo hicieron entrar a un cuarto en construcción y dejar el cuerpo, que se tropezó con algo y al iluminar se encuentra con un montón de cadáveres mutilados”, relató.
“Al volver me dice: ‘No sabés lo que vi adentro, el que traemos nosotros es una pinturita, está lleno de cadáveres adentro”, declaró.
