ESCUCHARLa diputada Elisa Carrió presentó un amparo para frenar el tratamiento del nuevo Código Civil y Comercial en la Cámara Baja, previsto para mañana.
Según la legisladora, el abordaje que se le dará en el recinto es inconstitucional, ya que el procedimiento violenta el principio de formación y sanción de leyes establecido en la Carta Magna.
Si el recurso prospera, el texto pasará a la Comisión de Legislación General para ser discutido.
Por su parte, el diputado nacional y titular del bloque Unión Pro, Federico Pinedo, reiteró su preocupación por “el tratamiento express” de la iniciativa y anticipó que, de ser aprobada, irá ante la Justicia para que deje sin efecto al sanción. “Es completamente contrario a la democracia que no intervengan en el estudio de una ley los diputados que el pueblo eligió”, sostuvo.
Para Pinedo, es “absurdo” pretender que se apruebe un texto con base en el análisis que hicieron quienes ya no ocupan una banca porque venció su mandato.
Tras una pausa de casi un año, el oficialismo buscará sancionar el nuevo Código Civil y Comercial, que introduce importantes cambios en materia de matrimonio, adopción, divorcio y composición de sociedades comerciales, entre otros cosas.
La oposición denunció que el tratamiento es antirreglamentario, y pretende que el proyecto se vuelva a debatir en comisiones antes de llegar al recinto, ya que se introdujeron cambios durante la aprobación del texto en el Senado.
En la misma sintonía que Carrió y Pinedo, el consejero de la Magistratura Alejandro Fargosi reiteró su preocupación por la intención del oficialismo de aprobar un nuevo Código Civil y Comercial y lo definió como “un error monumental”.
“Ningún país del mundo se lanzó a cambiar la totalidad de su sistema legal en los últimos 100 años, salvo poquísimas excepciones”, explicó. “Se trata de algo totalmente innecesario; cambiar todo implica tirar a la basura casi toda la experiencia, las doctrinas existentes, la jurisprudencia y modificar aspectos decisivos de la vida de los ciudadanos. Las consecuencias serán enormes”, concluyó.
Fargosi opinó que muchos de los que votarán el nuevo Código Civil probablemente no leyeron ni el vigente ni el que sancionarán.
Asimismo, el representante de los abogados porteños estimó que para actualizar los códigos Civil y Comercial bastan algunos retoques. “Se pueden modificar artículos sin necesidad de que el resto de las leyes pierda vigencia. Ésta es la mejor manera de conservar lo bueno y cambiar lo antiguo”, declaró.
