ESCUCHARSe espera que el Presupuesto 2017 prevea los recursos para estos nuevos tribunales, que permitirán sumar seis nuevos camaristas a la ciudad capital. Falta de personal, problemas edilicios y un código procesal vetusto, entre los principales problemas – Silvina Bazterrechea [email protected]
El Tribunal Superior de Justicia (TSJ) intentará que se incluya la creación de dos nuevas salas laborales en el presupuesto del Poder Judicial para el año próximo.
En total, se trata de seis nuevos cargos de camaristas -tres por sala- que tendrán como objetivo paliar las demoras que hoy se registran en los tribunales laborales de la ciudad de Córdoba.
El Colegio de Abogados cree que lo óptimo es la posibilidad de sumar cuatro salas laborales en lugar dos. No obstante, su presidente, Héctor Echegaray, adelantó a Comercio y Justicia que acompañarán el pedido que formulará el Alto Cuerpo.
La preocupación por la mora judicial en el fuero fue motivo de una reunión que ocurrió el pasado jueves entre el vocal del TSJ Luis Rubio, los 11 presidentes de las salas laborales y el Colegio de Abogados.
Después de reconocer que la elevada litigiosidad del fuero impide resolver las causas en tiempo y forma, los camaristas advirtieron de la necesidad de sumar personal para ayudar a tramitar con más celeridad las causas. Por ejemplol, consideraron que es importante que se sume un nuevo prosecretario por sala. Los abogados, en tanto, reclamaron que se cubran las vacantes que faltan.
Problemas edilicios
El problema de la mora en el fuero es complejo y multicausal. En la práctica, las salas ya no funcionan como un tribunal colegiado y, pese a todo, la mora sigue siendo elevada.
Echegaray destacó a este medio que al problema de falta de recursos humanos se suman los inconvenientes edilicios y de infraestructura.
Así, advirtió de que si los tres camaristas de una sala quisieren tomar audiencia el mismo día, no podrían hacerlo porque no tienen espacio físico. En este sentido, los letrados propusieron readecuar algún espacio para “armar” dos salas más de uso compartido.
Por supuesto, no es la solución, advirtió Echegaray, quien recordó que el Polo Judicial deberá albergar los tribunales laborales y se trata de un proyecto que está demorado “por la no afectación de fondos suficientes”, opinó. La semana próxima está prevista una reunión con los jueces de Conciliación para continuar analizando la situación en los tribunales laborales. La intención es que los encuentros se repliquen con una periodicidad mensual.
El panorama
– Un promedio de entre cuatro y cinco años es lo que demora la Justicia cordobesa en dictar sentencia en un juicio laboral, sin contar la instancia de casación, según un relevamiento de la Sala Laboral del Colegio de Abogados de Córdoba.
– En 2006 ingresaron 3.370 causas al fuero Laboral de Córdoba. En 2014, la cifra alcanzó 20.570, de las cuales 13.159 llegaron a las salas de la cámara que dictan las sentencias. Se calcula que en 2015 el número de expedientes que ingresaron al fuero llegó a 24.000, y unos 14.300 esperan para fallar en cámara.
– En la última década se produjeron reformas laborales procesales en Uruguay, Brasil, Chile, Perú, Venezuela, Bolivia y Ecuador, que concentraron y abreviaron el proceso laboral. En Brasil se implementó el Proceso Judicial Electrónico, que hizo desaparecer los expedientes de papel y se dictan sentencias en menos de seis meses.
