Lo definirá este miércoles un plenario del organismo. El magistrado es investigado como posible jefe de una asociación ilícita
El Consejo de la Magistratura concretará este miércoles un plenario en el que buscará definir si suspende, e inicia juicio político para destituir al juez federal de Mendoza, Walter Bento, investigado en la justicia penal como líder de una asociación ilícita.
Hace dos semanas la comisión de Acusación del Consejo aprobó, con el voto de los consejeros opositores y la abstención de los oficialistas, el inicio del proceso de destitución del juez mendocino, por el presunto mal desempeño en sus funciones.
En paralelo al proceso del Consejo, Bento enfrentará el próximo 26 de julio un juicio en su contra, acusado de cobrar a presos por narcotráfico y contrabando a cambio de beneficios.
En este complejo escenario, el juez mendocino ofreció su descargo en octubre del año pasado en dos etapas que sumaron más de 7 horas de exposición ante los consejeros, a quienes les dijo ser “inocente” y no haber cometido “ningún delito”.
Sus explicaciones no convencieron a los consejeros que aprobaron el proceso en la comisión con los votos de los consejeros opositores y la abstención de los oficialistas por “inconsistencias” en el dictamen.
“Nuestro bloque decidió no acompañar ese dictamen pero no se trató de una oposición al planteo acusatorio, mucho menos de un bloqueo y ni hablar de una defensa del magistrado, que claramente tiene que dar explicaciones”, señaló el consejero diputado Rodolfo Tailhade, en una publicación en su plataforma de videos.
“El dictamen no estaba a la altura de la gravedad de los hechos” explicó el consejero y añadió que era “un dictamen acusatorio inconsistente, que no trató con seriedad la prueba que se produjo a lo largo de la investigación y que no refutó los argumentos de descargo que presentó Bento”.
Con la asistencia de los 19 consejeros, el consejo necesita de 13 votos para suspender a Bento, un número muy ajustado si se descuentan los 6 consejeros del oficialismo que plantearon su disidencia con el dictamen.
Por ello, cobrará centralidad este miércoles el voto del camarista penal Alberto Lugones, afín al oficialismo pero con libertad de conciencia para votar con la oposición si lo considera necesario.
Además del caso Bento, el plenario intentará acordar ternas para cubrir cargos en tribunales orales criminales y en juzgados de ejecuciones fiscales y tributarias.