Legitiman a concubina para ser indemnizada por la muerte de su compañero

Tanto la cónyuge como la mujer accionante mantenían una relación de convivencia alternativa con el hombre fallecido, con hijos de casi la misma edad. Comprueban vida familiar dual [privado]

Al entender que la existencia de un matrimonio no le quita el derecho a la concubina con quien en paralelo el fallecido mantenía una vida familiar, teniendo con ambas mujeres hijos de edades similares, la Cámara 5ª Civil y Comercial de Córdoba admitió el recurso de apelación presentado por la segunda, admitiendo su legitimación para realizar un reclamo económico contra la parte demandada y reclamar por los daños y perjuicios acaecidos como consecuencia de su muerte, en un accidente de tránsito, de quien fuera su compañero.

El actor mantenía dos núcleos familiares paralelos, ya que existen pruebas de la subsistencia de un vínculo matrimonial con O., no disuelto, y de que el mismo se mantenía vigente, existiendo además dos hijos menores de corta edad, que incluso habían nacido con muy poca diferencia de meses y tuvo con ambas convivientes.

La mujer inició demanda por derecho propio y en representación de sus hijos menores de edad, reclamando los rubros daño moral y los daños materiales derivados de la privación de ayuda económica, como consecuencia del fallecimiento de su concubino y padre de los menores.

El juez de primera instancia rechazó la demanda entablada por la actora por derecho propio por falta de legitimación activa.

Al evaluar cuestión, el tribunal de alzada, integrado por los vocales Claudia Zalazar y Joaquín Ferrer , indicó que la crítica al fallo de grado se centra en la desestimación de la demanda incoada por la concubina por considerar que no ha acreditado su carácter de conviviente, atento a la subsistencia de un vínculo matrimonial del causante con otra mujer.

Serios indicios

Así las cosas, la cámara compartió con el juez de primera instancia que ha quedado acreditado en autos que existen serios indicios que permiten suponer que el actor mantenía dos núcleos familiares paralelos, ya que existen pruebas de la subsistencia de un vínculo matrimonial con O., no disuelto, y de que el mismo se mantenía vigente, existiendo además dos hijos menores de corta edad, que incluso habían nacido con muy poca diferencia de meses y tuvo con ambas convivientes.

En tal sentido, el fallo consideró que no es factible asignarle al vínculo con O. un mero carácter de formal o en los papeles, como pretende la recurrente.

Sin embargo, el tribunal advirtió que, a diferencia del a quo, la accionante ha logrado probar la existencia de una ligación especial con el ahora difunto por medio de las diversas testimoniales que ha aportado al proceso y remarcó que el causante ha tenido con ambas mujeres hijos de corta edad, naciendo éstos con escasos meses de diferencia.

En paralelo

De ello derivó la cámara que el fallecido, sin abandonar a su legítima esposa, desarrollaba una vida en familia en paralelo con la concubina, destacando que incluso una de las testigos aportadas por la actora muestra esta situación al describir que el fallecido venía del trabajo (era policía) y se quedaba en la casa de A. “uno o dos días y se veía el auto”, lo que permite deducir que el vínculo con ella no era el de una convivencia ordinaria de toda la semana sino de algunos días, lo que es compatible con la acreditada subsistencia de su vínculo familiar con O.

De lo expuesto, la alzada concluyó que esta dualidad no habilita sin más a denegarle una indemnización a la concubina reclamante, por existir un ligamen legal subsistente, si se acredita que el vínculo que unía al difunto con la actora era una relación regular, con visos de permanencia, en la que existían aportes económicos que se perdieron por la tragedia sufrida.

Ligamen

En este marco, consideró que en el caso quedó acreditada la existencia de un ligamen especial entre la actora A. y el fallecido y también que éste realizaba aportes económicos para el mantenimiento de ella y sus hijos, infiriéndose de ello que no resulta posible desestimar una indemnización por el fallecimiento del aportante, por la sola circunstancia de que la relación entablada no fuera un matrimonio regular o un concubinato exclusivo.

En definitiva, en el fallo se resolvió que correspondía acoger el recurso de apelación incoado y admitir el primero de los agravios vertidos, reconociendo a la A. legitimación para reclamar los daños materiales derivados de la privación de ayuda económica, como consecuencia del fallecimiento de V.