La Justicia ordenó indemnizar al cliente por un monto de tres millones de pesos. El hombre se atrasó en el pago de algunas cuotas de su crédito prendario
El banco ICBC deberá pagarle $3.000.000 a un cliente por secuestrar el auto de éste sin permitirle derecho a la defensa, después de atrasarse en una cuota de su crédito prendario. El demandante, que basó su recurso en una infracción a la Ley de Defensa del Consumidor (LDC), había celebrado con el banco un contrato de mutuo con prenda con registro, para la adquisición de un automóvil, en 2017. En uno de los primeros meses (octubre de ese año), por cuestiones personales no pudo abonar la cuota y en diciembre subsiguiente recibió un llamado de la entidad financiera en el que se le informaba que adeudaba la suma de $25.000, que abonó íntegramente, y continuó pagando los meses siguientes. En junio de 2018 le secuestraron el rodado.
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