El ex piloto de la empresa aérea Lapa, Enrique Piñeyro, volvió ayer a responsabilizar a la “cultura organizacional” de la compañía por la tragedia en el aeroparque metropolitano, que hace casi diez años provocó 67 muertos.
“Los grosísimos errores del piloto (Gustavo Weigel) y el desorden y desorganización que había en esa cabina eran los mismos que había en la empresa Lapa”, sostuvo Piñeyro al declarar como testigo en el juicio que se sigue al presidente de la línea aérea, Andrés Deutsch, y ocho directivos y empleados.
Piñeyro sostuvo que a Weigel en Lapa “no se le exigió lo que se le debe exigir a un piloto de Boeing 767” e incluso confió que él varias veces se negó a volar con este piloto por las desavenencias que tenía sobre la seguridad del vuelo.