La oposición en la Legislatura porteña presentó un proyecto para regular a Uber y a otras aplicaciones de transporte, siguiendo el ejemplo de Mendoza, que ya legalizó el servicio.
El legislador Marcelo Guouman (Evolución) formuló la propuesta que establece que aquéllas serán legales si cumplen condiciones. El texto prevé un tope al cupo de permisos y una limitación geográfica para la circulación de los vehículos. Además, indica que tanto las compañías como los choferes deberían pagar impuestos.
“Estamos atravesando una situación de absoluta irregularidad que perjudica a los consumidores por su falta de regulación y a los taxistas por la competencia desleal”, plasmó Guouman entre los fundamentos de su iniciativa.
La semana pasada, la firma norteamericana recibió su primera condena judicial, por una contravención. El magistrado Ladislao Endre la sancionó con una multa de 60 mil pesos, por “organizar actividades lucrativas no autorizadas en la vía pública”.
El titular del del Juzgado Penal, Contravencional y de Faltas Número 25 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) también le impuso dos años de inhabilitación para ejercer cualquier giro relacionado con el transporte en la jurisdicción. Ambas medidas involucran al CEO de Uber, Mariano Otero.
“La decisión de la Justicia contravencional ratifica la necesidad de una regulación”, manifestó la compañía, vía comunicado, y reiteró que es responsabilidad del Gobierno de la CABA fomentar la incorporación de tecnología a la movilidad.
Crecimiento
Uber da batalla en la Justicia y mantiene tanto su nivel de actividad como su intención de expandirse a otras ciudades.
Pese a las dificultades, registró el crecimiento más rápido en la Argentina. Según surge del balance que hicieron dos de sus principales directivos en la región, cada día incorpora entre 300 y 400 choferes y unos siete mil clientes.
El director de desarrollo de negocios de Uber en Argentina, Felipe Fernández Aramburu, declaró ante la agencia de noticias Reuters que a causa de la falta de regulación la compañía todavía no obtuvo beneficios. Cabe recordar que por orden judicial tanto las tarjetas de débito como las de crédito están inhabilitadas, lo que dificulta la rendición de comisiones.
Fernández Aramburu estimó que la crisis económica hizo que muchas personas acudieran a Uber como una alternativa para generar ingresos y precisó que uno de cada cinco conductores estaba desempleado.
No obstante, el director de Uber Latinoamérica, Andrew Macdonald, aclaró que el crecimiento actual no está relacionado específicamente a la situación económica de los choferes. El ejecutivo opina que la escasez de la oferta del servicio de transporte público hará crecer la demanda de viajes en la Argentina y confirmó que hay más actividad en los barrios con menor cantidad de líneas de colectivo y más alejados de las estaciones de trenes o subtes.