ESCUCHARUsina de Justicia, la ONG fundada y dirigida por la filósofa Diana Cohen Agrest, que recientemente cuestionó judicialmente que se invocara la pandemia para “otorgar prisiones domiciliarias casi indiscriminadamente”, por sus consecuencias sociales y por la vulneración de derechos de las víctimas, entre otros argumentos, exige participar en debates sobre temas carcelarios.
Lo hizo al criticar a la titular del Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (Inadi), Victoria Donda, quien en el marco de su función está encabezando encuentros virtuales sobre esa temática en lo que se propone cambiar el nombre del Servicio Penitenciario por el de «cuidado y resguardo de personas en cumplimiento de la pena».
Usina de Justicia acudió a su cuenta de la red social Twitter para reclamar ser escuchada. ”¿Cuándo será el día que dediquen tanta entidad y espacio de participación a las víctimas? Quisimos participar del encuentro abierto y fuimos censurados. Denunciamos esta discriminación repudiable de parte de un organismo que debería luchar contra la discriminación”, planteó el grupo.
Además, opinó: “Buscan cambiar el nombre y generar empatía y preocupación por el estado lamentable de las unidades penitenciarias, pero no propone inversión y mejoras. La respuesta siempre es discursiva y propagandística. No hay un plan concreto”.
Bajo esa premisa, la ONG enfatizó que la actual y otras iniciativas en la materia se reducen a “eternos debates partidarios e ideológicos donde sólo cabe la obsecuencia” y “donde el Estado paga sueldos a militantes que no gestionan”, mientras “hay familias enteras destruidas, una sociedad hundida en la decadencia moral y con la certeza de vivir en lo cíclico”.
“Somos una Asociación Civil que cree en la política de calidad y aborrece todo intento de marginación de las víctimas y oprimidos. Denunciamos todo acto de gobierno que busque favorecer a la impunidad en detrimento de los hombres y mujeres que tienen sueños nobles para su patria”, acotó Usina de Justicia.
En tanto, sostuvo que “los argentinos hemos naturalizado que la política sea un espacio de sordos donde no existe el sentido de la realidad”.
“Estamos inmersos en la era de la posverdad, donde todo se reduce a lo subjetivo, negando lo que es. Lo que es peor: es un nuevo totalitarismo que niega la estadística. En cada negación y en cada sangre derramada, estaremos presentes alzando el imprescindible valor de la Justicia”, concluyó.
La ONG enfatizó que la iniciativa que promueve el Inadi y otras en la materia se reducen a “eternos debates partidarios e ideológicos donde sólo cabe la obsecuencia” y “donde el Estado paga sueldos a militantes que no gestionan”, mientras “hay familias enteras destruidas, una sociedad hundida en la decadencia moral y con la certeza de vivir en lo cíclico”.
