El caso es impulsado por seis jóvenes de Portugal. Tras graves incendios en su país, alegan que temen por su salud y que sufren “ansiedad frente a las catástrofes naturales” y por “la perspectiva de vivir en un clima cada vez más cálido”
Buscan llevar a decenas de estados ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) por su inacción frente al calentamiento global.
El caso, impulsado por seis jóvenes portugueses, podría generar precedentes para la denominada “justicia climática”.
Su tratamiento empieza la semana que viene en Estrasburgo (Francia). Es importante por el número de acusados y porque los decisorios del TEDH son jurisprudencia vinculante para los 46 miembros del Consejo de Europa.
Los actores accionaron para llevar ante el TEDH a los 27 países de la Unión Europea (UE); a Suiza, Noruega y el Reino Unido, además de Rusia y Turquía.
Esfuerzos
Gerry Liston, el abogado de los demandantes, cree que un fallo favorable para sus asistidos permitirá “acelerar los esfuerzos” para “disminuir el cambio climático”.
“Desde un punto de vista jurídico, esto cambiaría las cosas en materia de justicia climática”, dijo el letrado, miembro de Global Legal Action Network (GLAN), la ONG británica que apoya a los demandantes.
Los seis jóvenes, de entre 11 y 24 años, decidieron actuar tras el incendio forestal que, en 2017, afectó el centro de Portugal. El fuego arrasó con decenas de miles de hectáreas y dejó más de 60 muertos y cientos de heridos. Alegan que temen por su salud y que sufren “ansiedad frente a las catástrofes naturales” y por “la perspectiva de vivir en un clima cada vez más cálido”.
El tribunal examinará primero la admisibilidad del planteo y puede desestimarlo.
La admisibilidad será objeto de debates. El procedimiento normal implica agotar primero los recursos ante los tribunales de los países en cuestión, pero los demandantes recurrieron directamente al TEDH citando la “carga excesiva y desproporcionada” de iniciar 32 expedientes separados en 32 Estados.
Gearoid O. Cuinn, director de GLAN, evaluó que se trata de una audiencia “sin precedentes” por “su alcance y sus consecuencias”.
“Nunca tantos países tuvieron que defenderse ante un tribunal, en ninguna parte del mundo”, sumó.
La iniciativa, según sus impulsores, se fundamenta en varios textos internacionales sobre el cambio climático, como el Acuerdo de París de 2015, así como la Convención Europea de Derechos Humanos.
Según ONU Medioambiente, entre 2017 y 2022, el número de causas judiciales por motivos climáticos se ha duplicado.
Asamblea
Hace horas, ante la Asamblea General de la ONU, en Nueva York, el secretario general del organismo internacional, Antonio Guterres, pidió que los líderes mundiales motoricen acciones conjuntas para superar las crisis que amenazan la paz y la preservación del planeta.
Además, sostuvo que reformar el Consejo de Seguridad y otras instituciones multilaterales “es necesario” para evitar “mayores divisiones” que dificulten la consecución de aquellas metas.
Al inaugurar los discursos de líderes mundiales, ante gobernantes y enviados de 193 países, Guterres dijo que las tensiones geopolíticas por la guerra en Ucrania, la emergencia climática y las nuevas tecnologías disruptivas son “amenazas existenciales” que están “trastornando el mundo”.
“Los gobernantes tienen una responsabilidad especial de lograr compromisos para construir un futuro común de paz y prosperidad para nuestro bien común”, declaró ante la 78ª Asamblea General.
Luego, al abrir una cumbre sobre cambio climático en el marco del evento, se refirió a los “horribles efectos del horrible calor” y citó las sequías, inundaciones, temperaturas sofocantes e incendios sin precedentes.
En esa línea, dijo que la crisis climática abrió las “puertas del infierno”.
Ante líderes de solo poco más de 30 países invitados al encuentro en reconocimiento a sus esfuerzos para combatir el cambio climático, Guterres advirtió que la humanidad se dirige hacia un mundo “peligroso e inestable”.
“La acción por el clima se ve empequeñecida por la magnitud del reto”, sumó.
Organización Meteorológica Mundial
Cabe recordar que en julio pasado, la Organización Meteorológica Mundial (OMM), el organismo especializado de las Naciones Unidas, reportó que la primera semana de ese mes fue la más cálida registrada hasta el momento.
“Las temperaturas baten récords tanto en la superficie marítima como en tierra firme, con efectos potencialmente devastadores sobre los ecosistemas y el medio ambiente”, declaró la OMM.
El organismo ya había advertido que las emisiones de gases con efecto invernadero incrementaron la intensidad, duración y ritmo de repetición de episodios de canícula; en especial, en Europa.
Ola de calor
También en julio pasado, en medio de una ola de calor agobiante en Estados Unidos que afecta a por lo menos 150 millones de personas, el presidente Joe Biden anunció medidas para “proteger a los trabajadores y a las comunidades” de las temperaturas extremas y para que el país “esté más preparado y pueda responder mejor” y ser más “resiliente” ante la crisis.
Al comenzar su discurso, al igual que el secretario de la ONU, Biden afirmó que el cambio climático es una “amenaza existencial”. Además, señaló que “ya nadie puede negar” su impacto.
Antes, en un comunicado, la Casa Blanca consignó que “muchos republicanos en el Congreso continúan negando la existencia misma del cambio climático, promocionan teorías de conspiración y siguen comprometidos con la derogación de la Ley de reducción de la inflación” impulsado por el jefe de Estado.
Según el documento, se trata del proyecto de ley de protección climática “más grande de la historia”.
Luego, en la conferencia de prensa, Biden citó los casos de San Antonio,Texas, que midió 47 grados, y de Phoenix, Arizona, en donde durante 27 días se registraron 43.
El presidente se reunió de manera virtual con el alcalde Ron Nirenberg, de San Antonio, y con la alcaldesa Kate Gallego, de Phoenix, para difundir los problemas que genera el calor extremo y analizar estrategias.
Entre las medidas que anunció figura la de aumentar la inversión en los servicios meteorológicos, para ampliar su capacidad operativa y mejorar los pronósticos.
Sequía
Desde hace dos años, el Oeste de Estados Unidos soporta una severa sequía. La Casa Blanca prometió obras para aumentar la capacidad de almacenamiento de agua y colocar tuberías de transporte.