La organización humanitaria Human Rights Watch (HRW) denunció en un informe que más de 4.200 niños y adolescentes sufrieron violencia sexual en las escuelas de Ecuador desde 2014.
“Ecuador fracasó en proteger a muchos niños y adolescentes de la violencia sexual ligada a la escuela, lo cual impacta en toda su vida, incluido en su derecho a la educación”, dijo Elin Martínez, investigadora de HRW y autora del informe de 75 páginas en un comunicado.
También habló de que “serias brechas” en los sistemas de educación y justicia en Ecuador “dejan a muchos niños y adolescentes sin protección, expuestos a abusos horribles”, estigmatizados por reportarlos y “bajo riesgo de que se repita el trauma”.
Si bien el informe de HRW menciona al menos 4.221 casos, advierte que podrían ser muchos más.
La actual administración de Ecuador, encabezada por el presidente Lenín Moreno, publicó en julio de 2017 datos sobre violencia sexual y adoptó un protocolo vinculante que obligaba a todos los adultos relacionados a los centros a denunciar situaciones en un plazo de 24 horas. También creó una base de datos y otras herramientas para facilitar investigaciones.
No obstante, Martínez estimó que aunque las acciones del país durante los últimos años para reconocer y afrontar la violencia sexual en las escuelas son importantes, deberían centrarse en impedir futuros abusos.