ESCUCHARDespués de desempeñarse en ella durante 17 años, Elena Highton renunció a su puesto.Ingresó a la Corte en 2004, durante la presidencia de Néstor Kirchner, luego de la destitución de Eduardo Moliné O’Connor, y marcó un hito: se trató de la primera mujer que ocupó un sillón allí desde la vuelta de la democracia
En 2018 decidió seguir desempeñándose como magistrada pese a haber cumplido la edad límite de 75 años. El gobierno de Mauricio Macri no objetó su continuidad.
Highton alegó dos motivos para seguir trabajando. Por un lado, que la propia Constitución Nacional fija, en su artículo 110, que los jueces de la Corte y de los tribunales inferiores de la Nación conservarán sus empleos mientras dure su buena conducta. Por otro, se basó en que la Convención Constituyente que reformó la Carta Magna no estaba habilitada para tratar el límite de la edad, porque ese tema no formó parte del “Núcleo de coincidencias básicas” que aprobó el Congreso Nacional al convocarla.
El presidente Alberto Fernández tendrá que postular el relevo de Highton. Quien se postule deberá ser aprobado por el Senado con una mayoría especial que el oficialismo, por el momento, no tiene y que, de repetirse el resultado de las PASO, estará más lejos de conseguir.
Highton comenzó su carrera judicial en 1973, como defensora oficial. En 1979 fue nombrada jueza en lo Civil y Comercial y en 1994 fue ascendida a camarista, el cargo que ejercía cuando fue convocada por Kirchner.
Panorama electoral
Ahora, ante el difícil panorama electoral que enfrenta el Gobierno, la designación del sucesor de Highton será complicada porque el oficialismo está alejándose cada vez más de los dos tercios de los senadores para votar al próximo supremo.
Bajo la conducción de Horacio Rosatti, la Corte deberá entender en más de una decena de causas delicadas para el poder político; entre ellas, las relativas a los casos Vialidad, Memorándum con Irán, Los Sauces, “cuadernos” y “ruta del dinero K”, muchos de los cuales tienen a la vicepresidente Cristina Fernández como encausada o querellante.
Los pormenores de la designación de Rosatti -con Highton y Ricardo Lorenzetti ausentes- confirmaron que hay divisiones en el tribunal, que quedaron expuestas en decisiones recientes, en las cuales no lograron unificar posiciones. Ejemplo de ello es el fallo que dictó en la causa que inició el Gobierno porteño por las clases presenciales en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
