Titán y Brownie, los dos perros que integran el Programa Perro de Terapia para Asistencia Judicial, del Ministerio Público Tutelar (MPT) porteño, ya acompañaron a 464 chicos y chicas, de las cuales 75,08% fue mujer y 24,58% varón, desde su incorporación al servicio en el que niñas y niños declaran en la Sala de Entrevistas Especializada (SEE).
Titán, un golden retriever, fue incorporado en octubre de 2019 y, “debido a la aceptación y gran demanda de este servicio”, durante el periodo de aislamiento social preventivo y obligatorios (ASPO) se integró a Brownie, un australian labradoodle.
Desde entonces “han acompañado a 464 chicos y chicas”, detalló el MPT mediante un comunicado.
“La experiencia ha sido muy efectiva ya que favorece mucho el trabajo de las y los profesionales que realizan las entrevistas porque los perros reciben previamente a las chicas y chicos que tienen que declarar y contribuyen a bajarles la ansiedad obvia que traen ante esta situación de vulnerabilidad”, expresó la asesora General Tutelar adjunta de Menores, Laura Grindetti, quien agregó que, cuando finaliza la entrevista, los perros “están allí esperándolos para seguir interactuando y disminuyen la angustia de lo revivido”.
Las infancias y adolescencias “tienen derecho a ser escuchados en todo proceso judicial en el que estén involucrados” y, según especialistas, pueden ser entrevistados a partir de los tres años “si tienen adquirido lenguaje o la capacidad simbólica para poder atravesar” dicha instancia.
La cámara Gesell “cumple con estándares de calidad internacional” y tecnologías que garantizan obtener “una declaración precisa y confiable”, agregó Grindetti.
Por último, informó que la SEE cuenta con una sala donde se realizan las entrevistas y otra de observación que, al estar integradas por “un equipo de psicólogos formados en técnica investigativa forense, evita la reiteración del relato en otras instancias”, lo que implicaría la revictimización de los niños y niñas.