El gobernador bonaerense dijo que, si el oficialismo pierde las elecciones, se violarán DDHH y su par formoseño afirmó que habrá “derramamiento de sangre”
El precandidato a gobernador bonaerense por el espacio de Javier Milei, Francisco Oneto, denunció penalmente a los mandatarios de las provincias de Buenos Aires, Axel Kicillof, y de Formosa, Gildo Insfrán, por supuesta intimidación pública.
El abogado citó recientes declaraciones de los dos referentes del oficialismo, quienes advirtieron sobre un posible “derramamiento de sangre” en caso de que Unión por la Patria no gane los próximos comicios.
Durante un acto, el formoseño cuestionó a la opositora Patricia Bullrich, que encabeza una de las boletas presidenciales de Juntos por el Cambio, al considerar que “el orden está bien” pero que “impuesto a fuego no sirve”.
“Lo que quieren aplicar va a ser con derramamiento de sangre”, disparó.
Luego, Kicillof dijo que la próxima elección “es tremendamente decisiva”, porque, a su entender, “los candidatos de la derecha” están “dispuestos a violar los derechos humanos”.
Oneto alega que los dichos de los integrantes del oficialismo configuran el delito de intimidación pública previsto y reprimido en el artículo 211 del Código Penal.
“Afirmar que si gana un partido político distinto al que gobierna se producirán eventos sangrientos, es un medio idóneo para infundir temor público”, manifestó.
El denunciante anticipó que será querellante en la causa que él mismo inició, en calidad de perjudicado, por ser uno de los miembros de la oposición que competirán en estas elecciones.
“La intención de las declaraciones es restar de modo ilegítimo votos a candidatos de partidos distintos del que gobierna, lo que es un atentado contra la libertad de elección de un sistema democrático”, argumentó.
Oneto hizo la presentación ante la Justicia Federal de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, al entender que es competente porque actuó previamente ante situaciones similares.
El expediente quedó a cargo del Juzgado Criminal y Correccional N° 4, a cargo del juez Ariel Lijo y del fiscal Carlos Rívolo.