También quedó inhabilitado para ejercer cargos públicos por cohecho pasivo agravado reiterado. Los abogados recibieron una pena de dos años y medio de prisión condicional. El fallo fue unánime
Después de transcurridos 13 años de que ocurrieron los hechos que se juzgaron en el juicio contra el ex fiscal Roberto Matheu y luego de varias horas de deliberación, la Cámara 7 ª del Crimen y los jurados populares condenaron ayer a aquél a seis años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos, la misma pena que había pedido el fiscal de Cámara, Marcelo Hidalgo, durante los alegatos. Pese a tratarse de una pena no excarcelable, Matheu no irá a la cárcel hasta que la sentencia quede firme. Además, deberá pagar una multa de 50 mil pesos.
En tanto, a los abogados Carlos Morelli y Marcos Juárez, el tribunal les aplicó una pena de dos años y medio de prisión en suspenso. El primero podrá seguir ejerciendo la profesión, mientras que el segundo fue inhabilitado por el mismo tiempo de la condena. Hidalgo había reclamado 3 años y 10 meses de prisión efectiva contra Juárez, y 2 años y medio contra Morelli, quien a lo largo del debate confesó haberle pagado coimas a Matheu.
Al concluir la lectura de la sentencia, se escucharon gritos e insultos contra el fiscal. Matheu, por su parte, dijo que “esto recién empieza” y adelantó que recurrirá el veredicto ante todos los organismos nacionales e internacionales.
Hidalgo, por su parte, se mostró satisfecho y prefirió destacar el papel jugado por el pueblo convocado para integrar el jurado y se pronunció “por unanimidad en cuanto a la culpabilidad de los acusados”.
Los fundamentos del fallo se conocerán dentro de 15 días.
Extensa defensa
La de ayer fue una jornada extensa. La última palabra de los acusados tuvo al ex funcionario judicial como protagonista: no dudó en pararse frente a los jurados populares e hizo una exhaustivo relato de la causa que incluyó críticas al fiscal acusador. “Éste es mi alegato y me voy a defender”, dijo el hombre que fue destituido de sus funciones en 2003. Matheu intentó convencer a los jurados de que en el juicio no se pudo acreditar que él haya pedido y, mucho menos recibido algún tipo de coimas de los abogados que terminaron con él sentados en el banquillo de los acusados.
En diferentes momentos, Matheu interpeló al fiscal y lo acusó de querer “cortarle la cabeza”. “He sido víctima en este juicio de los embates malintencionados del fiscal”, destacó. Y dijo que Morelli confesó la supuesta coima porque Hidalgo le prometió no pedirle la inhabilitación del título de abogado ni una condena a prisión.
En el último tramo de su alocución, el ex fiscal buscó emocionar a los jurados: “No soy la basura que a ustedes les han dicho, pude haber sido informal o bocón pero no cometí ningún delito”, señaló. Y volvió sobre sus dichos: la interna judicial de la que asegura ser víctima. “Esta causa fue armada ilegalmente, les pido por favor, con el corazón, que saquen la mugre debajo de la alfombra”, les dijo a los jurados.
Así, reiteró sus acusaciones contra el ex fiscal Gustavo Sandoval, la jueza Ana Lucero Offredi y el vocal de la Cámara de Acusación Carlos Salazar, el autor del voto que terminó por elevar la causa a juicio y determinar su destitución.