Negó que sea amigo íntimo o que tenga trato con Euclides Bugliotti. Al mismo tiempo recordó que el empresario no está imputado. Senestrari accedió a la prueba y dijo que ello le permitirá dar mayor impulso a la investigación.
La causa de la financiera Cordubensis (CBI) seguirá en manos del juez Ricardo Bustos Fierro, según él mismo lo decidió ayer tras rechazar el pedido de apartamiento que había solicitado el fiscal de Instrucción, Enrique Senestrari, y el abogado Carlos Nayi. La resolución habilita al magistrado a continuar con la investigación -al menos hasta que eventualmente la Cámara Federal de Apelaciones de Córdoba resuelva lo contrario- y a continuar con la indagatoria al presidente de CBI, Eduardo Rodrigo, y al resto de los imputados.
En la jornada de ayer, además de confirmar que continuará con la causa, Bustos Fierro resolvió “liberar la prueba”, según informó a la prensa el fiscal federal Enrique Senestrari.
La decisión del magistrado permitirá darle “mayor impulso a la investigación” teniendo en cuenta que – hasta el momento- eran muy pocos los elementos de prueba a los que había podido tener acceso la Fiscalía, indicó Senestrari.
No soy amigo
Al responder el pedido de recusación, Bustos Fierro negó cualquier vinculación con el empresario Euclides Bugliotti, pese a la foto que trascendió públicamente, en la que se lo ve abrazado al empresario en una fiesta.
El juez se justificó, explicando que Bugliotti no se encuentra imputado en la causa y, por lo tanto, “no reviste la calidad de interesado en los términos del art. 56 del CPPN”.
Asimismo, aseguró que no tiene “una amistad íntima, ni siquiera trato frecuente, con el señor Euclides Bugliotti”. Y agregó: “La foto que se esgrime como dirimente fue tomada en un festejo multitudinario organizado por la revista ‘Punto a Punto’ hace más de doce años y no tiene más significado que el de una mera circunstancia sin ninguna trascendencia; con la cual, en tal situación, no podría en modo alguno inferirse de dicha reproducción la afectación del principio de imparcialidad”.
Siemens, en la mira
La Administración Federal de Ingresos públicos (AFIP) se constituyó ayer como querellante de la causa CBI. La empresa Siemens es una de las que está en la mira del organismo recaudador.
Según confirmó ayer Senestrari, se libró un oficio a la Municipalidad de Córdoba para que remita la documentación vinculada con el contrato que Siemens había firmado con Red Bus, concesionaria del sistema prepago del transporte urbano capitalino, La sospecha -que fue denunciada en la carta del fallecido Jorge Suau- es que se aprovechaba la recaudación de Red Bus para monetizar cheques que luego se depositaban en la cuenta de Transporte del municipio en el Banco de Córdoba, aprovechando que se trata de una cuenta exenta de impuestos.