El juicio que se lleva adelante en la ciudad de Río Cuarto llegó hoy a su etapa final con el pedido de absolución del viudo Marcelo Macarrón y único acusado del homicidio.
Tras un largo alegato de más de tres horas fiscal Julio Rivero, consideró que no podía sostener la acusación de que el médico traumatólogo contrató un sicario para matar a su esposa y se inclinó por la hipótesis de que el asesino era un conocido de la mujer que la mató en el marco de una relación sexual consentida.
“Como soy un fiscal íntegro y no un fiscal dañino yo voy a pedir la absolución”, dijo Rivero. “Seria irresponsable oportunista y cobarde acusar” agregó.
De este manera, luego de 15 años de ocurrido el homicidio y tras 39 audiencias y más de 70 testigos presenciales, el crimen quedó impune.
Macarrón fue enviado a juicio como acusado por el delito de “homicidio calificado por el vínculo, por alevosía y por precio o promesa remuneratoria en concurso ideal” por el fiscal Luis Pizarro. Tanto el abogado Brito como los familiares de Macarrón aseguraron que no hubo ninguna prueba a lo largo del juicio, ni testimonio fundamental, que alcance para sostener la acusación contra el viudo, algo que en los alegatos compartió Rivero.