ESCUCHARSe trató del primer juicio en Francia por homicidios involuntarios cometidos por empresas. El accidente ocurrió en junio de 2009, en el océano Atlántico. Un argentino perdió la vida
A casi 14 años de que un avión de pasajeros con 228 personas a bordo se precipitó al océano Atlántico mientras cubría la ruta entre Río de Janeiro y París, la justicia de Francia absolvió a la aerolínea Air France y al fabricante de aviones Airbus por el cargo de homicidio involuntario.
La sentencia cerró el histórico juicio por la catástrofe del vuelo AF447, la más mortífera de la historia de las compañías aéreas francesas, ocurrida el 1 de junio de 2009, cuando el aparato desapareció de los radares en medio de una fuerte tormenta tropical.
Aunque las familias de las víctimas reclamaron que se responsabilizara a las firmas, los fiscales que llevaron el caso plantearon que no se probó su “culpabilidad formal”.
Si bien observaron que cometieron “faltas”, pidieron la absolución de ambas por considerar “imposible” demostrar su responsabilidad directa.
Se trató del primer juicio celebrado en Francia por homicidio involuntario de una empresa, un delito con una multa máxima de alrededor de 200 mil dólares.
Luego de peritar las cajas negras del aparato modelo Airbus 330, con matrícula F-GZCP, los investigadores concluyeron que los pilotos habían reaccionado “sin destreza” ante un problema relacionado con la congelación de los sensores de velocidad mientras el avión volaba a gran altura cerca de la línea del ecuador.
Precisaron que uno de los copilotos, desconcertado por las consecuencias de esa falla, adoptó una trayectoria ascendente que derivó en la pérdida de control del avión, que no pudo ser subsanada por ninguno de los tres pilotos.
Indicaron además que la aeronave se precipitó en caída libre -que duró cuatro minutos y 23 segundos- y se estrelló contra el Atlántico.
En el avión viajaban personas de 33 nacionalidades; entre ellas, un argentino.
