El socialismo fue derrotado el pasado fin de semana en elecciones municipales y autonómicas. El resultado superó las encuestas más pesimistas
El presidente español Pedro Sánchez (PESOE) decidió convocar elecciones generales adelantadas para el 23 de julio. Hasta hace horas, estaban prevista para fin de año.
Lo hizo mediante una declaración institucional sin preguntas tras la derrota del socialismo en los comicios autonómicos y locales que se celebraron el pasado fin de semana.
Sánchez sostuvo que una de las consecuencias de la debacle electoral es que “numerosas instituciones pasarán a ser administradas por nuevas mayorías”, conformadas por el PP y Vox, y que como titular del Ejecutivo y secretario general del PSOE asumía lo ocurrido y tenía que “dar una respuesta”.
Sobre los resultados, estimó que aconsejan “una clarificación de los españoles sobre las fuerzas políticas que deben liderar” y juzgó que lo mejor es que “tomen la palabra para definir el rumbo político del país”.
“Aunque las votaciones tenían un alcance municipal y autonómico, el sentido del voto tenía un alcance que va más allá”, sumó.
Los recientes resultados sobrepasaron las encuestas más pesimistas y los socialistas perdieron, entre otros, los gobiernos de Extremadura, Comunidad Valenciana, La Rioja, Aragón y Canarias.
En tanto, el espacio de izquierda Podemos se quedó sin representación en Madrid y Valencia y perdió presencia en cinco de los seis gobiernos autonómicos. Por otro lado, Más Madrid no superó las expectativas a pesar de mantenerse como segunda fuerza en la capital y la Asamblea, mientras que Compromís perdió el liderazgo de los gobiernos de la Generalitat Valenciana y el de la ciudad del Turia.