Tras una aplastante victoria en las elecciones generales británicas, Keir Satarmer, del Partido Laborista, es oficialmente el nuevo primer ministro, tras reunirse con el rey Carlos III en el palacio de Buckingham, en Londres.
“Nuestro país ha votado de manera decisiva por el cambio y por devolver la política al servicio público”, declare Starmer en su primer discurso, en Downing Street.
“Cambiar un país no es como darle a un interruptor”, señaló Starmer, y dijo que el mundo se volvió “más volátil”.
El nuevo primer ministro destacó que se centrará en temas cruciales para que las familias de clase trabajadora “puedan construir sus vidas”. En esa línea, prometió reconducir el difícil sistema sanitario del país, asegurar las fronteras y atender la necesidad de escuelas y viviendas asequibles. “Si les preguntara ahora si creen que Reino Unido será mejor para sus hijos, sé que demasiados de ustedes dirán que no, y por eso mi Gobierno luchará hasta que vuelvan a creer”, añadió.
Hace horas, Rishi Sunak dimitió como primer ministro y como líder del Partido Conservador, después de la derrota de los tories.