El índice de Confianza del Empresario Agropecuario (ICEA) que elabora regularmente la organización CREA arrojó como resultado de su encuesta de julio que 27% de los productores empresarios cree que es un buen momento para invertir. En paralelo, un reporte de la entidad analizó la coyuntura de los negocios agrícolas, lecheros y de ganadería de carne en el corto plazo, lanzando algunas líneas de preocupación.
Este índice, señala el reporte, se encuentra en sus máximos valores desde 2017, tras mostrar su segundo incremento consecutivo en la medición de julio. En este marco, casi 30% de los empresarios cree que es un buen momento para invertir, frente al 14% que se expresaba a favor durante la encuesta en marzo.
El negocio agrícola
Con muchas dudas sobre los planes de siembra de la próxima campaña de la cosecha gruesa 2024/25, debido a la problemática sanitaria asociada a la chicharrita (Dalbulus maidis), en la campaña pasada, los primeros relevamientos obtenidos de las encuestas SEA CREA muestran una merma relevante de la intención de siembra para el maíz (-23% versus el ciclo 2023/24, aproximadamente 1,65 millón de hectáreas menos). En este sentido, CREA dijo que “es crucial el monitoreo del vector, especialmente en las regiones del norte del país, para tomar la decisión de siembra”.
En el mercado local, las cotizaciones de soja y maíz disponibles actualizadas a julio, confirman que los precios están en el nivel más bajo de los últimos años, situación que continuó durante agosto. Además, el productor argentino está condicionado por el contexto local: el porcentaje del precio internacional que percibe el productor es 52% en soja y 65% en el cereal. Así, el nivel de precios como el contexto local (política cambiaria y tributaria) “condicionan la competitividad del negocio agrícola”.
Además, precisa el reporte de CREA, la presión tributaria argentina no sólo está dada por el impacto de los derechos de exportación, sino también por su burocracia y otras imposiciones. En ese sentido, el diferencial de alícuotas de IVA en las empresas CREA representa hoy en promedio un capital inmovilizado de $16.700/ha (equivalente a 18 dólares por hectárea).
Hacia adelante, las proyecciones iniciales para el ciclo 2024/25 describen un escenario complejo: en maíz, en el 62% del área proyectada dice que el precio de indiferencia está por encima del precio de mercado. Es decir que los precios actuales no alcanzan a cubrir los costos. Del mismo modo, girasol y sorgo presentan la mayoría de las zonas productoras con precios de indiferencia por encima del mercado. Por último, en soja, sólo 33% del área proyectada presenta un precio de indiferencia superior al del mercado. Estudio que se llevó adelante con los precios de julio, que eran mejores que los actuales de mediados de agosto.
Negocio ganadero
El panorama ganadero de la carne bovina “aún no está claro”. Los indicadores del negocio “muestran una menor faena acumulada en los primeros siete meses del 2024 (-9% interanual), aunque se mantiene por encima de los valores de años considerados de retención (+10% comparado con 2010 y +27% contra el 2011). “Más aún, las tasas de extracción de machos y hembras continúan en valores elevados respecto a esos momentos de retención”, advirtió el estudio.
La incertidumbre “también se registra en los indicadores” del negocio. “Si bien la ocupación de los feedlots también se mantiene en valores elevados respecto a los históricos (+4,5% hacia junio de este año), la viabilidad económica del corral está disminuyendo progresivamente desde nov-23. Así la decisión de encerrar más animales, parece estar asociada con las expectativas económicas del país. En ese sentido, los empresarios CREA que esperan situaciones favorables para el próximo año, son también en su mayoría las que planean hacer un mayor uso de maíz en el próximo cuatrimestre.
En tanto, en el mercado interno, “el consumo aparente de proteína animal se encuentra en 104 kg/cab/año (promedio a mayo pasado), al interior de lo cual continúa bajando la participación de la carne bovina (44%) y creciendo en términos relativos la del cerdo y el pollo”. Observando el mercado externo, los precios de los cortes con destino a China (75% de las exportaciones) “se encuentran estancados desde mitad de 2023”. Sin embargo, “en la segunda mitad del año se podría esperar una mejora en los precios a partir de una mayor demanda estacional de carne para satisfacer las necesidades del Año Nuevo Lunar Chino”.