La flexibilización del protocolo sanitario con relación al que se aplicó en las PASO, en virtud de la mejoría de la situación sanitaria de Argentina, que ya cuenta con gran parte de la población vacunada con dos dosis contra el coronavirus, agilizó la emisión del voto en los comicios legislativos que se desarrollan hoy en todo el país.
Así, con una participación de entre 71% y 72% del electorado al cierre de los comicios, los votantes realizaron filas dentro del establecimiento para emitir su sufragio, tras una resolución conjunta del Gobierno nacional y la Cámara Nacional Electoral que determinó la flexibilización del protocolo sanitario.
“La gran novedad es la intención de que las filas se formen dentro de los locales, permitiendo una mayor fluidez en el acto de votar y evitando tiempos de espera innecesarios”, dijo el subdirector de la Cámara Nacional Electoral, Gustavo Mason, en declaraciones formuladas a Radio Nacional.
No obstante, el secretario solicitó que se mantenga “la menor cantidad de gente en el establecimiento posible” por lo que, si bien señaló que “los niños no son un impedimento” para ingresar al cuarto oscuro, alentó a “concurrir los adultos solos” a las urnas.
Las provincias del norte del país como Corrientes y Chaco sufrieron hoy intensas lluvias, pero se mantuvo buen clima en la mayoría del territorio nacional, sobre todo en el área metropolitana de Buenos Aires, donde se concentra más del 40% del padrón, que permitió una buena aplicación del protocolo establecido.
Desde el oficialismo y la oposición se destacó que la amplia tasa de vacunación de la población contra el coronavirus favoreció el proceso electoral.
El ministro del Interior, Eduardo “Wado” De Pedro sostuvo que los comicios se desarrollaron con “total normalidad” y destacó que “queremos agradecerle a todos los argentinos que fueron a votar. Hubo más gente que en las PASO. Por suerte también funcionó el nuevo protocolo sanitario que permitió que se pueda votar”.
Desde la oposición el candidato de Juntos por el Cambio Martín Tetaz señaló que la nueva circunstancia de la Covid permitió que haya “un poco menos de miedo” a la hora de ir a votar “porque el coronavirus va cediendo y estamos todos más vacunados”. También resaltó el panorama favorable en ese aspecto el intendente de General Pueyrredón, Guillermo Montenegro (JxC).
“Vamos a flexibilizar los procedimientos para que el proceso de votación sea más ágil”, había dicho a Télam la Directora Nacional Electoral, Diana Quiodo, para permitir que quienes vayan a votar formen una sola fila dentro de los colegios, como se hacía habitualmente antes de la pandemia, en vez de hacer una cola en el exterior y esperar a que salieran quienes ya hubieran sufragado para ingresar.
De este modo, la funcionaria anunció la aplicación de lo dispuesto en la reciente acordada extraordinaria número 124 de la Cámara Nacional Electoral donde se estipularon modificaciones en los protocolos y medidas para agilizar el sufragio en los centros de votación y evitar tiempos muertos u ociosos entre votante y votante.
Se apuntó con estos cambios a evitar situaciones similares a las del 12 de septiembre, donde en algunos lugares hubo aglomeración de personas, con largas filas sobre las veredas, lo que generó malestar y reacciones de desaliento y deserción de votantes por la lentitud del procedimiento.
“Es probable que algunas personas al llegar a los establecimientos de votación y viendo las filas en el exterior se amedrentaran y también supusieran que había una larga espera, que en muchos casos fue efectivamente así, porque el tiempo promedio que cada elector permaneció votando fue también mayor”, comentó Quiodo.
Señaló que “el tiempo promedio que el elector tarda en votar es de 2 a 3 minutos en una elección”, pero en las PASO “fue de 7 a 8 minutos, según determinó la justicia electoral”.
De todos modos, se mantuvo el uso de barbijo y la distancia social con otras personas como forma de evitar contagios. Y los adultos mayores y las personas de grupos de riesgo tuvieron prioridad para votar entre las 10.30 y las 12.30.
Al igual que en las PASO, se recomendó higienizar las manos con alcohol en gel o solución sanitizante antes y después de ingresar al cuarto oscuro, llevar un bolígrafo propio para firmar el padrón, no salivar el sobre para cerrarlo y utilizar pegamento o solamente introducir la solapa dentro del sobre.
Asimismo, se mantuvo la disposición establecida en las primarias, que fijó que en el caso de ser estrictamente necesario se permitía el ingreso con acompañantes a los lugares de votación.
El voto, al igual que en las PASO, fue obligatorio y un derecho de los ciudadanos mayores de 18 y hasta 70 años, y optativo para aquellos que superaran esa edad y para los jóvenes de entre 16 y 17 años.
Como en las PASO, estuvieron exceptuados de votar quienes tengan síntomas compatibles con la Covid-19 o estén cumpliendo con el aislamiento preventivo.
Además, estuvieron exceptuados quienes el día de los comicios se encontraran a más de 500 kilómetros de distancia del lugar de votación, que deberán justificar ante la autoridad policial más próxima que esa situación obedece a motivos razonables.