El escandaloso concurso para elegir juez en Paraná causó algo poco común en el Consejo de la Magistratura de la Nación: los integrantes del cuerpo, por unanimidad, lanzaron duras críticas contra el mecanismo actual de selección de magistrados y coincidieron en la necesidad de mejorarlo.
La decisión se tomó luego de analizar la situación de Hernán Tuppo, el fiscal que concursó para ser juez de un tribunal oral federal de Paraná y fue descubierto cuando intentaba hacer trampa en una examen escrito, gracias a que conocía de antemano la prueba que le iban a tomar. En el Consejo sospechan que también hubo fraude en otra prueba, destinada a cubrir un cargo en Concepción del Uruguay.
El bochornoso episodio reavivó el debate sobre el sistema de concursos de designación de magistrados y motivó que la diputada kirchnerista Diana Conti y el catedrático Mariano Candioti presentaran dos proyectos de reforma. Ambos fueron aprobados en general por los 12 consejeros que estuvieron presentes en el plenario de la comisión de selección del organismo.
El tema será retomado este jueves, día en el que se debatirán en particular algunos puntos sobre los cuales los representantes del Consejo aún no lograron ponerse de acuerdo.
Sobre el tema, Comercio y Justicia dialogó con el representante de los jueces en el Consejo de la Magistratura, Luis María Cabral, uno de los sectores con más desconfianza a los cambios que se están por venir.
-¿Qué evaluación hace de los proyectos presentados por Conti y Candioti?
– En términos generales, estoy de acuerdo con los cambios que se propugnan. No obstante, hay algunas cuestiones especiales que queremos debatir antes de aprobar un nuevo reglamento.
– ¿Cuáles son los puntos que esperan debatir?
– La diputada Conti propone que los exámenes dejen de ser anónimos, que todos los candidatos a juez tengan los casos a evaluar de antemano y que haya un examen oral y público. Sobre lo primero, no estamos de acuerdo. Sí nos parece muy buena la idea de que se sume, después del examen escrito, la prueba oral y pública. El otro tema que tendremos que debatir es la integración de los jurados y los puntajes que se le asignarán a cada etapa del proceso de seleccción.
– ¿Cree que estos cambios permitirán agilizar el proceso de selección de magistrados?
– Justamente es uno de los objetivos. Lograr que los concursos sean rápidos, es uno de los desafíos que tiene el cuerpo.
– ¿A partir de cuándo podría ponerse en vigencia el nuevo reglamento?
– Primero se tiene que aprobar y una vez que eso ocurra se podrá aplicar inmediatamente, siempre que se trate de nuevos concursos. Los que hoy están en vigencia continuarán con la vieja metodología.
– ¿Cuántos son los concursos hoy en vigencia y cuánto tiempo promedio están demorando?
– Hay unos 11 concursos con el reglamento actual. El tiempo de duración es difícil de estimar. Los concursos que más se extendieron en el tiempo por una serie de dificultades fueron los que se abrieron para los juzgados federales de Capital Federal. Esos llevan ya unos cinco años. Con el resto no ha ocurrido lo mismo.
-Además de la modificación del concurso de selección, ¿cree que finalmente se introducirán cambios en el Consejo de la Magistratura?
– No creo que eso ocurra, al menos en el corto plazo. Quizás después de diciembre