El primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson, confirmó la primera muerte causada por la variante ómicron de coronavirus, advirtió de que se avecina una “marea” y elevó la alerta sanitaria a nivel 4 en una escala de 5. La decisión fue tomada luego del incremento de casos de esta nueva cepa que afecta al país. Las autoridades médicas y científicos de Inglaterra, Escocia, Gales e Irlanda del Norte fueron las que recomendaron elevar la alerta sanitaria a ese nivel luego de observar el rápido crecimiento de la variante. Además, sostienen que ómicron se está propagando con más velocidad que la cepa delta y que las vacunas ofrecen menos protección.
Posible colapso
Otro de los motivos por los que las autoridades británicas adelantaron la vacunación es la posible saturación de los hospitales. Si bien en primera instancia los síntomas de ómicron parecen más leves con relación a otras cepas, los especialistas creen que tiene una carga viral más contagiosa
El gobierno británico aceptó los consejos de los profesionales y decidió adelantar un mes la vacunación de terceras dosis de refuerzo a todos los mayores de 18 años, que estaba prevista para finales de enero de 2022. Johnson afirmó, mediante un comunicado que se transmitió por televisión a toda la nación, que “tendrán la oportunidad de recibir el refuerzo antes de Año Nuevo”.
El Ministerio de Salud informó que las personas vacunadas con la dosis de refuerzo que estén en contacto con personas infectadas con la variante ómicron deberán realizarse pruebas de antígenos durante siete días. En cambio, quienes no estén vacunadas tendrán que aislarse por 10 días.