El especialista en RRHH Hugo Nisembaum propone una gestión enfocada en los aspectos positivos de las personas, en lugar de gastar tiempo y recursos intentando mejorar su desempeño. Hoy diserta en Córdoba sobre Mapa de Talentos
Respetar y estimular lo mejor que existe en cada persona y concentrarse en los aspectos positivos que pueden ser aplicados productivamente, es la propuesta que trae a Córdoba el consultor brasileño Hugo Nisembaum, especialista en estrategia y gestión de talentos. Hoy presentará su enfoque pragmático y humano basado en la premisa de que el mayor activo de las organizaciones son los denominados “puntos fuertes” de los colaboradores, es decir, un combo de talentos, conocimientos, habilidades y experiencias que, juntos, “proporcionan el óptimo funcionamiento y desempeño diferenciado”.
Bajo el título “Mapa de talentos: la gestión en las organizaciones con base en los puntos fuertes”, el especialista dictará un workshop organizado por la Licenciatura de RRHH de la Universidad Blas Pascal (UBP). El encuentro será a partir de las 9, en el campus de la casa de altos estudios.
Según Nisembaum, los “puntos fuertes” muchas veces no son bien comprendidos ni administrados. Por ello aclara la diferencia con otros conceptos como “talento”. Éste engloba como capacidades naturales un conjunto de sentimientos, pensamientos y comportamientos frecuentes que pueden ser aplicados productivamente. Mientras que “puntos fuertes” son manifestaciones auténticas que energizan a los que los aplican. Saber cuáles son y cómo capitalizarlos es el desafío para optimizar una empresa.
Sostiene que, construyendo los “puntos fuertes”, las organizaciones podrán descubrir talentos no utilizados en la organización. “Mucho tiempo y recursos son gastados intentando mejorar el desempeño, sin embargo poco es dirigido a obtener lo mejor de las personas”, distingue.
Empresas más atractivas
Por otra parte, destaca que entender las necesidades de las personas es una de las claves para atraer y retener talentos. “A las personas les gusta usar sus ‘puntos fuertes’, porque aplicándolos son más confiados y se reenergizan. Una empresa con base en éstos acaba por ser más atractiva en el mercado de trabajo, especialmente para la generación Y (jóvenes de entre 18 y 30 años)”.
Según el enfoque que Nisembaum presentará hoy en la UBP, usar los mencionados puntos fuertes en una empresa mejora la retención, calidad, satisfacción del cliente, ventas, rentabilidad y crecimiento del negocio. Además, “amplía la perspectiva mental de las personas, estimulándolas a descubrir nuevas formas de pensar y actuar, construyendo resiliencia y la capacidad de lidiar con los efectos de los eventos negativos”.