ESCUCHAREl CIRS 2015 se realizó en La Rural con conferencias magistrales de Lula da Silva y dos premios Nobel de la Paz. Empleabilidad y sustentabilidad, en el eje del debate.
Después de dos intensas jornadas que contaron con la participación de diversas personalidades, el viernes pasado llegó a su fin el 3er. Congreso Internacional de Responsabilidad Social (CIRS), que se llevó a cabo en el predio de La Rural, del barrio de Palermo, Buenos Aires. Del evento participaron, entre otros, dos figuras que fueron Nobel de la Paz: Rigoberta Menchu (1992) y Kailash Satyarthi (2014). El CIRS 2015 se desarrolló bajo el lema “Federalismo responsable con eje en la empleabilidad”. Se trata de una iniciativa impulsada por la Fundación Observatorio de Responsabilidad Social (FORS), que busca debatir y reflexionar en torno a temáticas centrales del desarrollo sustentable y la responsabilidad social, desde Argentina pero para toda la región y el mundo.
El congreso -que fue abierto al público y gratuito- contó con cinco conferencias magistrales, dos de ellas a cargo de Menchu y Satyarthi, del ex presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, y de los expertos argentinos Bernardo Kliksberg y Alessandra Minnicelli. Asistieron al encuentro representantes del mundo académico, empresarial y social. Durante el evento, la subsecretaria de Responsabilidad Social del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación,
Karina Yarochevski, entregó una distinción especial a Susana Trimarco (madre de Marita Verón, víctima de trata), en reconocimiento a su lucha por los derechos humanos.
Las conferencias atravesaron las siguientes temáticas de interés nacional, regional y global: políticas públicas y responsabilidad social; planificación energética para el desarrollo nacional; educación para un mundo complejo; banca sustentable y finanzas éticas; empleabilidad; desafíos globales para una agenda del desarrollo; balance social y normativas e indicadores propios, entre otros.
El equilibrio necesario
Con la promoción de estos espacios de construcción colectiva, empresas privadas de primera línea del país y el Estado nacional buscan compartir conductas socialmente responsables asumidas por cada uno de los actores y sectores. “Una nueva manera de plantear el equilibrio necesario entre el hombre, la naturaleza y la economía como base de trabajo en políticas públicas y en acciones de responsabilidad social”, según lo resumió Karochevsky.
El jueves 10, Minnicelli inauguró el evento junto con Kliskberg, presidente Académico del congreso, marcando la herencia que dejaron los dos congresos internacionales desarrollados en años precedentes y que posicionaron al CIRS como una cita de categoría internacional en la temática. El viernes se escucharon los aportes de Menchú y Satyarthi.
«Estamos del lado de los que piensan que los problemas económicos, ambientales, religiosos o políticos pendientes de resolver tienen alcance mundial, y que la esperanza está en unirnos y en cooperar seriamente para resolverlos», señaló Minnicelli en la apertura, frente a un auditorio para más de mil personas colmado. Y en referencia al eje planteado para el CIRS 2015 sobre la empleabilidad, agregó: «Los lemas de nuestros congresos son al mismo tiempo objetivos a lograr y son también las conclusiones que van surgiendo de los debates en las ediciones anteriores. Y para eso son estos CIRS, para autorreflexionar, para aportar a una autocrítica desde lo individual y desde las organizaciones sobre el impacto de nuestros actos. Nos llevan a definir a la responsabilidad social (RS) como un equilibrio necesario entre el hombre, la naturaleza y la economía. Si la economía se privilegia sobre el hombre, hay depredación de los recursos naturales y hay personas excluidas. Lo vivimos en Argentina en 2001. Por eso hay que pensar la RS como la única forma de garantizar la supervivencia de la humanidad. Queremos poner énfasis en la inserción laboral y en el empleo productivo y creativo», remarcó en medio fuertes aplausos.
Continuó Kliksberg, uno de los máximos referentes nacionales en RS, quien habló sobre la necesidad de ésta para resolver las “infamias morales”, en referencia -entre otros asuntos- a la crisis de refugiados que se vive en el mundo. «La responsabilidad social es el problema más grande de todos», aseguró emocionado. «Venimos a apuntar hacia soluciones. El programa de esta reunión es salir fortalecidos, en un escenario en el cual hay demagogos xenófobos de Europa, con sectores de la población contaminados, que pegan a los niños que tratan de encontrar un lugar en el mundo».
Kliksberg presentó al expresidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, quien volvió tras participar en la primera edición del congreso, en 2013. «Lula nos defiende a todos. Claro que hay esperanza. Tenemos cómo contestarle a Donald Trump y a la insensibilidad europea», remarcó el referente. Durante la segunda y última jornada del Congreso se presentaron los Nobel Menchú -líder indígena guatemalteca que recibió la mención en 1992 por su labor en defensa de los derechos humanos-, y Satyarthi -activista indio por los derechos de los niños, galardonado en 2014-.
