Un tribunales de la Corte Nacional de Justicia ecuatoriana le impuso la pena de ocho años de prisión al ex mandatario radicado en Bélgica.
El ex presidente de Ecuador Rafael Correa fue condenado en ausencia a ocho años de prisión como autor del delito de cohecho agravado.
La sentencia dictada por un tribunal de la Corte Nacional de Justicia con sede en Quito implica que el ex mandatario, radicado en Bélgica, pierde sus derechos políticos durante 25 años.
El juicio del caso conocido como “Sobornos 2012-2016”, que involucró a 17 personas más, se desarrolló en tres salas del tribunal de Quito -integrado por los jueces nacionales Iván León, Iván Saquicela y Marco Rodríguez- y en otra adicional de la Corte provincial de la región de Guayas.
El ex presidente fue responsabilizado por cohecho en la financiación del partido Alianza País; es decir, se concluyó que intervino en una red de corrupción montada bajo su Gobierno.
Correa, procesado judicialmente por varios expedientes, calificó al debate como una “payasada”.
En las audiencias, a inicios de marzo, la fiscal general Diana Salazar acusó al ex mandatario de haber dado las órdenes para que se cometiera el delito sin necesidad de participar directamente: “Todo estaba organizado desde arriba”, dijo.