lunes 25, noviembre 2024
lunes 25, noviembre 2024
Comercio y Justicia 85 años

El negocio de la violencia en América Latina

ESCUCHAR

El testimonio de un investigador colombiano quien indagó en las respuestas que involucran la participación ciudadana y la asociatividad público-privada. Por Eduardo Moncada*

Pregúnteles a las personas en ciudades de América Latina qué es lo que más les preocupa hoy en día y es probable que entre sus principales respuestas se encuentre la inseguridad. América Latina está experimentado niveles de violencia letal que, en países como El Salvador, exceden los registrados durante las guerras civiles de finales del siglo XX, sólo que la violencia actual se despliega en las calles de las principales ciudades de la región. Desde Ciudad Juárez hasta San Salvador, desde Caracas hasta Río de Janeiro, la inseguridad en medio del crimen y la violencia es una preocupación creciente para los legisladores y los ciudadanos. Las comunidades empresariales de la región cada vez protestan más por las amenazas a la inversión y la productividad. Pero ¿qué papel juegan las empresas, los líderes sociales o los criminales en configurar las formas en que las ciudades responden a la violencia?

Yo abordo estas preguntas en mi nuevo libro, Cities, Business, and the Politics of Urban Violence in Latin America (Ciudades, Negocio y Políticas de la violencia urbana en América Latina). ¿Qué encontré?
Un hallazgo general es que las respuestas a la violencia se ven profundamente configuradas por la política. Esto puede parecer algo de sentido común, pero vale la pena desentrañarlo ya que uno de los temas recurrentes entre las agencias de desarrollo es que la clave para reducir eficazmente la violencia es despolitizar el asunto. No obstante, a medida que aumenta la preocupación pública por la criminalidad, también lo hace la relevancia política. Las elecciones locales y nacionales en América Latina dependen cada vez más de la resonancia que tengan entre los votantes los planes de los candidatos para confrontar con la inseguridad.
Sin embargo, las respuestas a la violencia urbana también son inherentemente políticas porque pueden preservar o reformar la distribución de los recursos y el poder en una región caracterizada históricamente por la inequidad socioeconómica y la política excluyente.

Algunas ciudades lanzan respuestas a la violencia que favorecen tácticas radicales o de “mano dura”, pero que hacen muy poco por afrontar los causantes socioeconómicos y políticos de la violencia urbana; mientras que otras optan por proyectos más participativos que posicionan el fortalecimiento de la ley y el orden dentro de planes políticos más amplios, con el fin de reducir las desigualdades de larga data y aumentar la voz política de las poblaciones marginadas en barrios violentos. Mientras antes reconozcamos la naturaleza política de las respuestas a la violencia, más rápido podemos trabajar en la creación de condiciones que hagan esas respuestas más efectivas y sostenibles.
Pero, ¿qué explica por qué las ciudades buscan en primer lugar respuestas tan diferentes a la violencia? Hay dos factores que pueden ayudarnos a responder esta pregunta. El primero es el carácter de las relaciones entre los gobiernos de ciudad y los intereses de las empresas locales dominantes. Los fuertes vínculos entre los sectores público y privado a escala local facilitan la socialización de recursos e información, generan confianza y ayudan a resolver conflictos. A su vez, la atención nacional e internacional a las respuestas políticas generó capital político e inversión extranjera, al tiempo que se abordaba la inequidad y se profundizaba la participación política. Sin embargo, cuando hay ausencia de fuertes vínculos es mucho más difícil sostener respuestas similares a la violencia. Pero si bien desentrañar las relaciones del sector público-privado es crítico para entender cómo las ciudades responden a la violencia, no es suficiente.

Los diferentes tipos de control territorial entre grupos armados al interior de las ciudades generan distintos retos y oportunidades políticas para hacer frente a la violencia. Las respuestas participativas a ésta enfrentan la mayor amenaza en las ciudades donde existen muchos actores armados con una alta capacidad para la violencia letal y que compiten activamente entre sí para controlar el territorio y las cuotas del mercado ilícito. Por el contrario, los escenarios con muchos actores armados pero que cuentan con una baja capacidad para involucrarse en la violencia sostenida producen relativamente menos violencia y pocos retos para la autoridad estatal local. Pero, ¿qué dinámicas de control territorial, en Medellín, ayudaron a que se convirtiera en un modelo global de gobierno urbano? La disminución de la violencia letal le permitió al gobierno y las empresas locales sostener el apoyo político para el proyecto participativo, a la vez que le permitió a las hegemonías criminales continuar operando una variedad de economías ilícitas, desde el narcotráfico hasta la extorsión y la apropiación de tierras. De esta manera, el “milagro” de Medellín se debe en parte a la compleja convivencia entre líderes políticos, intereses empresariales y poderosos actores criminales.

¿Qué nos dicen estos hallazgos sobre los retos y las oportunidades que tienen las ciudades del mundo en desarrollo al confrontar la violencia? Primero, que la política brinda un punto de partida poderoso, tanto a los académicos como a los legisladores, para entender mejor los factores que moldean las respuestas a la violencia urbana; segundo, que la colaboración entre los sectores público y privado puede contribuir en gran medida hacia el avance y sostenimiento de proyectos que encaren los principales causantes de la violencia; y tercero, que abordar la violencia urbana puede requerir interacciones difíciles y controversiales entre actores formales e informales: interacciones cuyas implicaciones a largo plazo para la democracia y el desarrollo ameritan una mayor investigación.

(*) Profesor asistente de Ciencia Política en Barnard College, Universidad de Columbia, Nueva York. Autor de Cities, Business, and the Politics of Urban Violence in Latin America (Stanford University Press, 2016). Artículo publicado por la Universidad Cooperativa de Colombia en su sitio http://esperandoeleco.ucc.edu.co/

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Leé también

Más populares

¡Bienvenid@ de nuevo!

Iniciá sesión con tu usuario

Recuperar contraseña

Ingresá tu usuario o email para restablecer tu contraseña.

Are you sure want to unlock this post?
Unlock left : 0
Are you sure want to cancel subscription?