Rusia entrará en cesación de pagos si este miércoles 18 de marzo abona en rublos, en lugar de dólares, el vencimiento de 117 millones de deuda previsto en la moneda estadounidense.
Si este fuera el caso, sería la primera vez que Rusia declara un “default” desde 1998.
A comienzos de mes, el gobierno ruso prohibió que los emisores de deuda rusa, ya sea soberana o corporativa, paguen intereses a inversores extranjeros.
En realidad, el Banco Central de Rusia explicó que los emisores pueden decidir pagar los cupones, pero los depositarios de los valores no harán efectivo el pago.
En ese sentido, las dos principales cámaras de compensación del mundo, Euroclear y Clearstream, dejaron de operar con deuda rusa.
Por su parte, la calificadora de riesgos Moody’s y la agencia Morgan Stanley Capital Internacional (MSCI) colocaron a Rusia en el último escalafón de sus calificaciones como “Mercado aislado”, no apto para realizar inversiones ni comprar deuda.
Mientras que la agencia de calificación Fitch revisó a la baja dos veces en una semana la nota de la deuda rusa, una decisión que significa que el riesgo de un impago de la deuda soberana es “inminente”.