Lo indicó un informe privado, al señalar que la situación del rubro es “delicada” y que todavía no se advierte una “pronta recuperación”.
El sector supermercadista potenció la expansión de la marca propia, motivado por la retracción del consumo y un cambio de hábitos de los consumidores, que realiza compras con menos frecuencia y de un ticket menor, detalló un informe privado
La situación del sector es “sumamente delicada”, afirmó la consultora Claves al reseñar que “no sólo se trata de uno de los rubros más golpeados” por la caída del consumo, sino que “no se advierte una pronta recuperación”.
Los niveles de ventas en supermercados registraron una retracción de 12,6% en abril a precios constantes, según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), mientras que en autoservicios mayoristas esta caída fue de 12,9%, lo que supone diez meses consecutivos de retracción para ambos rubros.
En este contexto, el informe privado destacó que en este sector se estima que ocho de cada 10 consumidores se pasaron a segundas marcas en algunos de sus principales rubros de consumo y las utilizan entre 20 y 60% de sus categorías de compras.
A partir de estos datos, se enfatizó en que frente a la caída del consumo y a un cambio de hábitos de los consumidores, “el sector supermercadista viene potenciando la expansión de la marca propia, buscando la innovación y el desarrollo de productos a menor costo”.
“Algunas de las cadenas ya han desarrollado más de 400 productos básicos de su marca propia, ofreciendo un surtido amplio a menor costo”, se resaltó, mientras que otras también apelaron a “estrategias de reorganización del negocio a través de procesos de reconversión, ampliación y reducción”.
Reconversión
También en esta coyuntura, la reconversión mayorista viene desarrollando una alternativa orientada a convertir grandes superficies “híper” en locales mayoristas “maxi” u otra de reconversión “parcial”, como es el caso de los que ofrecen espacios mayoristas dentro del canal minorista, según se especificó
Como parte de las estrategias de ampliación y reducción, otras empresas decidieron ir por el ajuste y desprenderse de negocios que dan pérdida o no alcanzan la rentabilidad esperada, para centrarse en aquellos que tienen mejor rendimiento.
“En esta estrategia de ahorro, las segunda marcas y las marcas propias encontraron espacio para crecer”, resaltó la consultora, al indicar casos emblemáticos en categorías como galletitas, leches, papel higiénico, hamburguesas, bebidas, arroz o aceites.
Sin embargo, también las marcas propias están experimentando una evolución de los productos básicos a otros más evolucionados, en la que las marcas pesan más como toallitas desmaquillantes, tinturas o snacks.
La clave que posibilta ganar nuevos consumidores a este segmento es “mantener la calidad de las marcas líderes con un precio 20% más bajo” promedio, lo que permite registrar crecimientos interanuales de participación de ventas totales de hasta 20%.