La Cámara alta aprobó anoche en sesión especial el proyecto de ley de Economía del Conocimiento, que promueve mediante incentivos fiscales, hasta 2029, a las empresas y emprendedores en el diseño, adaptación y desarrollo de producción de software y servicios afines a las nuevas tecnologías.
La iniciativa fue aprobada por unanimidad tras más de dos horas de debate.
Sin embargo, a la hora de votar sólo respaldaron la medida los integrantes del bloque del Frente de Todos y sus aliados, ya que el interbloque de Juntos por el Cambio decidió ausentarse de la votación, aunque dio el debate.
El expediente volvió a la Cámara de Diputados porque el oficialismo introdujo varias modificaciones.
La Ley de Economía del Conocimiento había sido, originalmente, aprobada por el Congreso durante el gobierno de Mauricio Macri, pero la administración de Alberto Fernández suspendió su aplicación hasta mandar una nueva iniciativa al Parlamento que se aprobó en Diputados en junio.
El Régimen de Promoción de la Economía del Conocimiento tendrá vigencia desde el 1° de enero de 2020 para las empresas adherentes y hasta el día 31 de diciembre de 2029.
El proyecto promueve la industria del software; la producción audiovisual en formato digital; la biotecnología, bioinformática e ingeniería genética; nanotecnología y nanociencia; industria aeroespacial y satelital; e ingeniería para la industria nuclear; entre otros rubros.
Podrán acogerse a los beneficios las empresas constituidas en Argentina o habilitadas a trabajar en el país que tengan en regla su documentación y en las que se acredite que 60% de su facturación total del último año se genere a partir de las actividades promovidas. En el caso de emprendimientos nuevos se deberá acreditar fehacientemente el desarrollo de las actividades promovidas.