Para empresas cordobesas de la actividad, no sólo es factible sino también útil y necesario, aunque reclaman otras medidas de fondo. La Cámara del Maní lo pide a viva voz desde septiembre pasado. Economía apuesta a dólares diferenciales para “el primer trimestre de 2023”
¿Es posible pensar en un “dólar maní”, similar en ventajas al actualmente vigente “dólar soja”? A juzgar por lo que reconoció este martes el ministro de Economía, Sergio Massa, sí e incluso es factible pensarlo en un plazo extremadamente corto. El “dólar maní” viene siendo reclamado desde hace meses por la cámara de empresas del sector, integrado centralmente por firmas radicadas en la provincia de Córdoba, donde se produce más de 90% del maní que sale de Argentina al exterior. Sería un instrumento “útil”, reconoció a Comercio y Justicia uno de sus máximos referentes, el presidente de la empresa Manisur, Juan Alcorta.
El reclamo sectorial viene desde septiembre pasado, cuando se puso en marcha la primera versión del régimen de incentivo cambiario para el incremento exportador de la actividad sojera, el famoso “dólar soja”. En aquella oportunidad, Ivana Cavigliasso, la presidente de la Cámara Argentina de Maní, pidió claramente la extensión de la medida a su segmento productivo.
Todo quedó en interrogantes hasta el fin de semana que pasó, cuando se dio a conocer la apertura de la segunda versión del “dólar soja”. Las organizaciones que representan a productores y empresas que se dedican a distintas economías regionales levantaron la voz para hacer oír sus propias demandas y entre ellas, también los maniseros. Cerca de 95% de la producción de maní argentino (uno de los mejores del mundo en calidad) se exporta y paga diversos impuestos. Las retenciones han sido corregidas en parte, pero la actividad sigue utilizando insumos importados, que se pagan a la cotización general y es la razón central por la cual los maniseros piden su “dólar maní”.
Hasta este martes, del Gobierno sólo se respondía con silencio. Hasta que Massa sorprendió con una alocución positiva, al disertar en el XLIII Consejo Federal Agropecuario, ocasión en la que confirmó que el Estado nacional procurará, “a lo largo del primer trimestre” de 2023, junto con “los sectores y las provincias”, poner en marcha programas de incremento exportador focalizados en las economías regionales, similares al aplicado con la soja.
Hizo el anuncio luego de advertir de la necesidad de diferenciar en materia de comercio exterior los sectores económicos que plantean “sus urgencias y sus necesidades” de aquellos que “buscan una ventaja en términos financieros” y generan “especulación financiera alrededor del estoqueo de bienes”, valiéndose de “relaciones políticas o judiciales”.
“Aspiramos a que, a lo largo del primer trimestre, con los sectores y las provincias, tengamos la oportunidad de llevar adelante programas de fomento exportador que multipliquen la capacidad de exportación de las provincias y que nos permitan poner incentivos, ya sea por tipo de cambio, disminución de retenciones o suspensión del cobro de algunos impuestos”, señaló Massa.
El titular del Palacio de Hacienda consideró que con esa medida se impulsará a “cada una de las economías regionales”, incluyendo el maní cordobés, y que para eso es necesario asociarse “con cada uno de los sectores productivos”.
Al respecto, advirtió de que el Gobierno será claro en “diferenciar a los que plantean sus urgencias y sus necesidades” de mejorar sus condiciones de exportación, de aquellos que “buscan una ventaja en términos financieros”.
En ese sentido, criticó a quienes procuran “generar especulación financiera alrededor del estoqueo de bienes”, valiéndose de “relaciones políticas o judiciales”, poniendo como ejemplo el fallo de la Justicia en favor de la importación de toallas por un valor de 129 millones de dólares.
Por otra parte, advirtió sobre la necesidad de “cuidar el bolsillo del ciudadano”, y que a pesar de la importancia del comercio exterior “el 70% del PBI es el mercado interno”, por lo que instó a las provincias a que participen de los programas de precios, con “premios y castigos para aquellos que participen de los incentivos”.
La opinión calificada
Comercio y Justicia consultó la opinión calificada de Juan Alcorta, presidente de Manisur SA y extitular también de la Fundación Maní Argentino. “Un tipo de cambio que corrija el atraso que actualmente tiene -desde hace ya bastante tiempo atrás- la cotización oficial, siempre es bienvenido para todas las actividades productivas, en este caso regionales”, expresó Alcorta ante la pregunta sobre un eventual “dólar maní”. “Principalmente para aquellas con sesgo netamente exportador, como el maní”, agregó, para luego explicar el porqué de la posición: “Este atraso con respecto a la tasa de inflación que soporta la economía nacional, implica en realidad que las actividades como la nuestra .junto a otras similares- vienen soportando el efecto de una inflación en dólares, en los costos operativos. Esto nos resta rentabilidad y competitividad”, precisó.
Un eventual “dólar maní”, en la visión de Alcorta, “puede ser coyunturalmente útil, pero lo que en realidad se necesita es un ordenamiento macroeconómico que de previsibilidad y estabilidad de las reglas de juego en el tiempo. Esto incluye la política cambiaria”, completó el ejecutivo.