Instó a Macri a “dejarse ayudar” y a realizar una amplia convocatoria que incluya a gobernadores y demás sectores de la sociedad. Insistió en cuestionar políticas nacionales y dijo que cualquier baja tributaria provincial llegará cuando se restituyan fondos que por ley de corresponden a Córdoba. Volvió sobre la Caja
El gobernador Juan Schiaretti instó al presidente Mauricio Macri a que convoque a un “acuerdo social y de gobernabilidad” para abordar diferentes temas que requieren de un amplio consenso de cara al futuro del país.
La convocatoria que, según indicó el mandatario a Comercio y Justicia, tendría que incluir a gobernadores y también a sectores empresariales y organizaciones sindicales, debería concretarse “rápidamente, sea cual sea el resultado de las elecciones legislativas”.
Ésta es la manera, señaló el gobernador, en un país donde nadie tiene mayoría, “de que entre todos nos pongamos de acuerdo para sacar a Argentina de las dificultades que tiene”.
Schiaretti lanzó la propuesta al hablar ayer en la jornada de cierre del décimo Coloquio Industrial, organizado por la Unión Industrial de Córdoba (UIC).
En rigor, se trató del elemento distintivo de su discurso en el que repitió críticas a las políticas económicas y sociales del presidente Macri.
En contraposición, dijo que siempre gestionará en defensa de los intereses de los cordobeses.
Más tarde, en contacto con los medios, insistió en que los candidatos de Unión por Córdoba para las próximas elecciones son quienes más fielmente representan la defensa de Córdoba en el Congreso, donde se deberán debatir temas claves que involucran al país y a la provincia.
Una vez más, tanto el discurso como las declaraciones posteriores, estuvieron teñidas de frases propias de una campaña electoral que por estas horas ingresa en la recta final con vistas a las PASO del próximo día 13.
“Es clave que el Presidente se deje ayudar”, dijo.
“Me parece que para ayudar a alguien, como se tiene que dejar ayudar, es importante que pueda escuchar el mensaje de la urna, y que entienda que es necesario enmendar errores y hacer este acuerdo que es imperioso para que la Argentina avance. Y sólo, con el mensaje de urna que le sea adverso vamos a poder lograr esto”, aseveró en tono de campaña.
“No hay posibilidades de que algún iluminado se crea que puede solo con todo”, subrayó y puso como ejemplo a Chile, donde su dirigencia fue capaz de lograr el consenso en temas centrales.
Schiaretti dijo que los empresarios necesitan reglas de juego claras que les permitan desarrollarse, frase que motivó tímidos aplausos.
“Argentina tiene un gran futuro con este acuerdo de gobernabilidad; no podemos ponerlo en juego por una campaña electoral; queremos que Argentina vaya hacia adelante y Córdoba es el motor de ese futuro”, agregó.
Schiaretti repasó su plan de obra pública y volvió a criticar a la Nación en temas varios, en línea con la estrategia discursiva que inauguró días atrás en el mismo escenario aunque -en aquella ocasión- en las jornadas organizadas por la Cámara de Comercio.
No hubo anuncios concretos para la industria.
En todo caso, insistió en que una eventual reducción de la presión fiscal provincial llegará cuando la Nación devuelva a Córdoba lo que le corresponde por ley.
Ese cambio debería darse a partir de una amplia reforma fiscal que el presidente Macri ya anticipó se debatirá después de las elecciones de octubre.
De todas formas, y más allá de las críticas, Schiaretti reconoció la ayuda de Nación en algunas obras que la Provincia ejecuta y afirmó que, a diferencia del anterior Gobierno central, el actual “no discrimina a Córdoba”. Con todo, insistió en que el reparto de recursos debe hacerse conforme la Ley de Coparticipación, votada en 1988.
Hoy, afirmó Schiaretti, la Nación se queda con 62% de los fondos y las provincias, con 38%, “y lo más grave es que todo lo que se queda la Nación va a la Capital Federal y al conurbano (bonaerense)”, vía subsidios u obras que no llegan al interior.
Córdoba perdió el año pasado 14.500 millones de pesos en Coparticipación, monto que -sumado a los 21 mil millones de las retenciones de soja- alcanzan un total de 35.500 millones que se llevó el Gobierno central.
“Que me devuelvan una parte de eso y yo elimino en el acto los impuestos de aduana interior que están sufriendo los industriales de Córdoba, que nos devuelvan porque ahí sí vamos a poder eliminar los impuestos distorsivos, ahí sí se puede eliminar Ingresos Brutos”, insistió.
“Hay que gravar las ganancias, no la producción”, dijo respecto a una reforma fiscal.
En ese tramo, el gobernador sumó críticas a las altas tasas de interés que impulsa el Gobierno vía Banco Central.
“Por mantener las tasas de interés tan altas se logra que no haya consumo, no hay reactivación y no hay empleo; es más negocio poner la plata en la bicicleta financiera que en la producción”, expresó.
Este medio le recordó que la Provincia tiene más de ocho mil millones en Lebac y otros 800 millones en letras en dólares. “Es para proteger el ahorro de los cordobeses”, explicó. “Todos los instrumentos de política económica que se utilizan sirven un tiempo, son siempre coyunturales”, concluyó.
OTRA VEZ LA CAJA
Schiaretti insistió en que la Nación resuelva en lo inmediato el financiamiento del déficit de la Caja de Jubilaciones, tal como lo exige la ley.
Recordó que ayer volvieron a enviar a la Nación la documentación “en un nuevo formato”, conforme el último requerimiento.
“Somos los únicos que giramos todo lo requerido. Nos vienen dando vueltas”, señaló e instó al Gobierno a resolver el tema en el corto plazo.